Alberto Núñez Feijoo: «Estoy completamente seguro de que no habrá terceras elecciones»

m. cheda REDACCIÓN / LA VOZ

ELECCIONES 2016

Sandra Alonso

«A medida que pasen las semanas, el PSOE y C?s irán ajustando su criterio. Cuesta desandar en una hora lo andado»

28 jun 2016 . Actualizado a las 16:29 h.

Llevaba cuatro años y medio el PP gallego sin mejorar al mismo tiempo en votos, porcentaje de apoyo y escaños. El domingo lo consiguió. Y eso ha dado alas a su presidente, que también lo es de la Xunta, para creer en la consecución de una tercera mayoría absoluta en las autonómicas de este otoño, que no prevé adelantar. En el corto plazo, Alberto Núñez Feijoo (Os Peares, 1961) se confiesa «completamente seguro» de que no habrá nuevas elecciones generales. En estos momentos, ve «una obligación» pactar con el PSOE, al que, de repente, elude criticar. «No creo que deba hacerlo», alega.

-No habrá terceras elecciones y Mariano Rajoy será presidente. ¿Pone la mano en el fuego?

-Yo pongo la mano en el fuego por la madurez del pueblo español. A partir de ahí, sería la mayor sorpresa que, por segunda vez, y con mayor intensidad en esta segunda, los políticos que dicen encarnar la nueva política volviesen a rechazar el resultado de las urnas. ¿Conclusión? Estoy completamente seguro de que no habrá terceras elecciones.

-Pues Ciudadanos y el PSOE ya han dicho que, en principio, de investidura nada de nada...

-Entiendo que cuesta desandar en una hora todo lo andado. Pero, a medida que pasen las semanas, y a medida que vayan viendo que eso no tiene reflejo ni en su electorado ni en la sociedad, irán ajustando su criterio a lo que escuchen, no solo de quienes no les han votado, sino fundamentalmente de los que les han votado. Máxime, cuando ambos han sufrido un retroceso considerable en las urnas y el PP, un ascenso.

-¿Qué prefiere: la vía de Ciudadanos, PNV, Coalición Canaria... o el acuerdo con el PSOE?

-Eso le corresponde al presidente, que ya ha dicho, sin limitar nada, que va a hablar con todos aquellos que tengan un planteamiento constitucional en nuestro país. Lo iremos viendo, pero, sin duda, un acuerdo con el PSOE sería un acuerdo bueno para afrontar los retos que hay en este momento: el independentista, la financiación de las comunidades autónomas, el posicionamiento de España en la nueva UE...

-¿Y ese pacto sería más sencillo con Pedro Sánchez al frente del PSOE o con Susana Díaz?

-Cualquier opinión que conlleve una disminución de la posibilidad de acuerdo no creo que deba de darse. Por tanto, actualmente en la secretaría general del PSOE está Pedro Sánchez.

-¡Caramba! Vaya cambio de discurso después de zurrarse ustedes tanto en campaña...

-La campaña está no para zurrarse, sino para concretar la posición de cada uno e intentar llamar la atención sobre la posición del adversario. Pero la campaña se acabó, y las urnas han hablado. Y ahora hay que interpretarlas. Y si las urnas nos dicen que es conveniente intentar un acuerdo con el PSOE, nuestra obligación es hacerlo.

-En el caso de que alguien exigiera la cabeza de Rajoy a cambio de dar el Gobierno al PP, ¿debería claudicar su presidente en beneficio del partido?

-Yo nunca vi eso como realidad y ahora ya no lo veo ni como hipótesis.

-Entonces, ¿en qué sí podría ceder el PP?

-Nosotros hemos hecho acuerdos con CiU, con el PNV, con el Partido Aragonés, con Foro Asturias, con la UPN... Y, oiga, en fin, la única vez que un socialista fue lendakari fue porque el PP le dijo sí a cambio de nada.

-Ya, pero, contra todos esos precedentes, están cuatro años de rodillo parlamentario de Rajoy...

-Hay cuatro años en que cada uno tiene que saber cuáles son sus responsabilidades: cumplir los requisitos europeos, bajar el paro, recuperar la economía...

-¿Y en Galicia? ¿Se ve hoy más cerca que el sábado de lograr una tercera mayoría absoluta?

-A mí lo que me interesa realmente es que el partido se movilice, y lo que está claro es que lo que ha influido en el domingo muy notablemente es la movilización del PPdeG. Sería ridículo no admitir que hoy el partido está más movilizado, y también que no he recibido muestras de apoyo y de ánimo del resto de los compañeros como si hubiésemos sacado aquí la mayoría absoluta.

-En el caso de que no la consiguiese, ¿tendería la mano al PSdeG o miraría a Ciudadanos?

-Esa hipótesis, francamente, no la manejo. Ni siquiera están convocadas las elecciones...

-Para esa convocatoria que tiene pendiente, ¿cambian los resultados del 26J su hoja de ruta?

-No. Sustancialmente, no cambia nada.

-Entonces, ¿las autonómicas serán en septiembre, en octubre o en noviembre finalmente?

-[Riendo] Esa es una pregunta que probablemente podamos contestar en agosto.

-Es decir, si hasta agosto no la va a contestar, queda claro que en septiembre no serán seguro...

-Bueno, yo solo he dicho probablemente. Sería una imprudencia avanzar algo que ni siquiera he decidido, honradamente. Lo previsto es irnos al otoño.

-¿Y, para entonces, prevé que los socios de En Marea continúen todavía juntos?

-No me atrevo a opinar, pero, si no llegan juntos allí, probablemente tengan peor resultado. Y ya sabemos que esto de las mareas de Podemos es un planteamiento exclusivamente de conveniencia. Que no hay planteamiento político detrás. Lo acabamos de ver en la campaña, hemos visto las opiniones que tienen los unos de los otros, cómo unas formaciones se negaban a ir a mítines de otras, las ausencias notables en la noche electoral... En fin, esto no es un partido con un programa y un proyecto, sino simplemente un conjunto de movimientos políticos unidos para sustituir al PSOE, suprimir al BNG y evitar la mayoría absoluta del PP. Porque, cuando le pregunta a un ciudadano qué han hecho las mareas de Podemos por él, honradamente, no creo que nadie pueda decir nada concreto.

-¿Le ha sorprendido cómo, contra pronóstico, ha aguantado el PSdeG frente a esa coalición?

-No mucho. El PSOE ha bajado un poco, unos 5.000 votos. Digamos que su bajada ha sido contenida, pero la clave es otra. Lo que sí me ha sorprendido es que En Marea ha bajado 67.000 votos. Eso es lo más reseñable de la noche electoral, junto con los 34.000 votos que ha subido el PP.