La Diputación de A Coruña, escaparate de un multipartito para las autonómicas
27 may 2015 . Actualizado a las 16:06 h.La Marea de Vigo adelantó ayer que no formará parte del nuevo gobierno de la Diputación de Pontevedra con su único diputado. En realidad, ni al PSOE ni al BNG les hace falta su concurso para sustituir a Rafael Louzán, al sumar ambas formaciones dos diputados más que los obtenidos por el PP, en una situación histórica. En Lugo, la combinación de un tripartito no es posible tampoco pues las candidaturas alternativas no lograron obtener reflejo alguno en la Diputación. Y Ourense sigue siendo feudo popular.
La única combinación que puede mostrar un ejemplo de lo que podría llegar a ser un gobierno alternativo al PP en la Xunta se registrará en la Diputación de A Coruña. Allí PSOE, BNG y las mareas compostelanas y coruñesas despliegan más poder que el PP y raro será que renuncien a ejecutarlo.
No habrá obstáculos
Aunque las mareas aún no han tocado siquiera esa tecla, agobiadas por la puesta en marcha de sus proyectos en las alcaldías de A Coruña y Santiago, desde dentro se adelanta que con toda seguridad no habrá problema para articular una alternativa que desaloje al PP del órgano provincial. Máxime cuando en las dos ciudades los beneficiados por la alianza serán las dos mareas y en el órgano provincial lo será el PSOE. Están por ver las condiciones que pone encima de la mesa el Bloque, pero la salida que den a la Diputación coruñesa no podrá diferir mucho de la que aporten para la de Lugo.
Nada más de momento. O sí, porque los partidos que integran las mareas están persuadidos de que la confluencia con el resto de las formaciones de izquierda donde sea posible desplazar al PP se formulará con toda seguridad, pues es lo que se ha vendido en la campaña.
Distinto es el guion que pretenda jugar el sexto invitado del órgano provincial coruñés, la Alternativa dos Veciños que comanda el alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane. De entrada, ya advierte a los nuevos actores de la izquierda que él pretende ser el notario de lo que ocurra en la Diputación, especialmente con los contratos.
Advertencia de García Seoane
Seoane advirtió ayer de que será él, en contra de lo previsto, quien casi con plena seguridad ocupará el escaño que le corresponde a su formación en el palacio provincial. «Se teño que denuncialos ante a Xustiza o farei», avisa ya, reclamando un protagonismo que no está dispuesto a perder, aunque numéricamente pueda no ser decisivo en el laboratorio político que será la Diputación.
De ella se despidió ayer el que fuera uno de sus presidentes y uno de los ediles más veteranos en activo de la Galicia urbana, el socialista Salvador Fernández Moreda. Se va cuando su partido vuelve a hacerse con las riendas de la institución, y cuando el PP, a través del todavía presidente en funciones, Diego Calvo, reconocía ayer que el final de ciclo de su partido en la Diputación es claro, pero según sus palabras, porque «no estábamos en el mejor momento para presentarnos a unas elecciones desde el punto de vista partidista», achacó.
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