Galicia destruyó 7.900 empleos en el primer trimestre, un 30 % más que hace un año

Ana Balseiro
Ana Balseiro LA VOZ

ECONOMÍA

CESAR TOIMIL

Pese al bache estacional, en doce meses la ocupación ha crecido en 30.100 personas

26 abr 2019 . Actualizado a las 12:03 h.

El vaso de la encuesta de población activa (EPA) publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística puede verse medio vacío o medio lleno, como lo demuestra el hecho de que para el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, sea «la mejor» EPA de un primer trimestre de los diez últimos años, y los sindicatos se sitúen en las antípodas calificándola de «desastre». ¿Cómo es posible? Lo es, en función de dónde se ponga el foco: en la foto intertrimestral o interanual del empleo.

El comportamiento del mercado de trabajo entre enero y marzo, comparado con el último trimestre del 2018, ha sido negativo, acusando de nuevo la estacionalidad y el efecto calendario, especialmente la ausencia del tirón que la Semana Santa tiene en la contratación, y que al desplazarse a abril no ha podido compensar la caída provocada por el final de la campaña de rebajas. De este modo, hasta marzo se han destruido en España 93.400 puestos de trabajo que, sin embargo, suponen un 25 % menos de los que se esfumaron en el mismo período del 2018. Galicia, por contra, ha tenido un peor comportamiento, ya que perdió 7.900 empleos en el trimestre, cifra que es un 30 % superior a la de hace un año, cuando se destruyeron 5.600.

Tras el bache del arranque del año, el número de ocupados en la comunidad se sitúa en 1.080.200 personas, mientras que el conjunto del país baja de nuevo de los 19,5 millones.

Más ocupados que hace un año

Sin embargo, en términos interanuales el vaso de la EPA se ve medio lleno, ya que en los últimos doce meses el número de personas con empleo creció en Galicia en 30.100 (un 2,9 %). La media española aún lo hizo más, al acelerar un 3,2 % y aumentar la ocupación en casi 600.000 personas. De hecho, la ministra de Economía, Nadia Calviño, que valoró la EPA en rueda de prensa, coindió en el análisis optimista del presidente de la Xunta, al poner el foco doce meses atrás: la cifra supone el mayor número de ocupados en un primer trimestre en España en los últimos 11 años.

Sin embargo, de vuelta a Galicia y al período más inmediato, la evidencia es que el mercado laboral ha frenado y muestra algunas peculiariedades. Entre ellas, que el empleo perdido en el trimestre ha sido exclusivamente masculino: hay 8.100 varones menos trabajando frente a 200 mujeres ocupadas más. La secretaria de Emprego de CC.?OO. de Galicia, Maica Bouza, lo vincula a la crisis del modelo productivo tradicional, que en la comunidad pasó del sector primario al de servicios, descuidando industria y construcción, áreas masculinas y ahora en dificultades.

Curiosamente, hasta marzo, y pese a la complicada situación de algunas de las grandes industrias (Alcoa, Isowat, Ence...), el industrial ha sido el único sector que ha creado empleo: 1.900 ocupados más que en el trimestre anterior. Por contra, el primario perdió 4.300 (-6,3 %), la construcción 1.900 (-2,8 %) y otros 3.400 (-0,4 %) los servicios. En interanual solo se contrae la ocupación en la construcción y el campo.

En lo que respecta a la calidad del empleo, de los 865.100 asalariados que Galicia registró en el primer trimestre, 641.500 tenían contrato indefinido. Comparado con el trimestre previo, el número de empleos estables cayó en 5.000 (-0,8 %), igual que el volumen de temporales, que se redujo en 3.200 personas (un 1,4 %). Sin embargo, en términos interanuales, la contratación indefinida creció cinco veces más que la temporal. Feijoo se mostró optimista, asegurando que «lo importante» es que «tres de cada cuatro asalariados gallegos son indefinidos y nueve de cada diez trabajan a jornada completa».

El paro subió en 5.000 personas, pero la tasa gallega sigue por debajo de la nacional

La ralentización del mercado de trabajo se ha traducido en un aumento del paro. Galicia cerró el primer trimestre con 153.900 personas desempleadas, 5.000 más que en el trimestre previo, lo que ha elevado en medio punto, hasta el 12,5 %, la tasa de paro, que al cierre del 2018 estaba en la comunidad en su nivel más bajo en diez años. Había que remontarse al último trimestre del 2008 para encontrar un dato más reducido.

En cualquier caso, aún con este repunte, el desempleo gallego es muy inferior a la media nacional, que se sitúa en el 14,7 %, después de aumentar en 49.900 personas entre enero y marzo y situar la cifra total en 3.354.200 desempleados. Un aumento espoleado por la menor caída de la población activa en los últimos meses.

Sin embargo, pese al bache en los primeros compases del año, las cifras se tiñen de verde si se amplía el foco a la evolución en los últimos doce meses. Así, el número de parados en Galicia disminuyó en 32.600 personas en ese período (-17,5 %), lo que supuso recortar en 2,6 puntos la tasa de paro, mientras que en España lo hizo en 441.900 personas (-11,64 %), una comparativa que la Xunta puso en valor.