La brecha del impuesto de sucesiones indigna a la ciudadanía
02 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.¿Cuánto paga un contribuyente por heredar? Depende. La respuesta no es única y está supeditada a la comunidad autónoma en la que el fallecido residiera, ya que el de sucesiones es un impuesto cedido y sobre el que, por tanto, las Administraciones autonómicas tienen capacidad normativa. Fijan tarifas, reducciones, bonificaciones y exenciones a discreción, de ahí la enorme brecha que se abre en función del territorio y que hace que heredar, aún cuando el supuesto sea idéntico, pueda ser 1.500 veces más caro -literalmente- en unas comunidades que en otras.
Esta asimetría fiscal, que año tras año pone negro sobre blanco el Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF) en su informe Panorama de la fiscalidad autonómica y foral, ha llegado a colmar la paciencia de muchos contribuyentes, que este invierno se han movilizado con especial intensidad en Asturias o Andalucía -las dos comunidades con una presión fiscal más elevada en este tributo- reclamando su supresión o, cuando menos, su armonización, aprovechando que la reforma del sistema de financiación autonómico está sobre la mesa.
Un ejemplo del REAF ilustra lo diferente que puede ser la factura de heredar para un soltero de 30 años que recibe bienes de su padre por valor de 800.000 euros, de los que 200.000 corresponden a la vivienda habitual del fallecido. El joven pagaría hasta 164.000 euros en Andalucía y apenas 134 en Canarias, 1.200 veces menos. Galicia, donde desde el 1 de enero del pasado año las herencias inferiores a 400.000 euros (por heredero y excluyendo la vivienda habitual) están exentas de tributar, es una de las comunidades con una fiscalidad más ventajosa en materia de sucesiones, como ilustra el supuesto del gráfico. De hecho, Facenda estima que la última modificación dejó exentas de tributación al 99 % de las herencias de la comunidad.
Suavizar el impuesto
Y la flexibilización de Galicia encontrará eco en breve en la vecina Asturias, ya que las protestas ciudadanas parecen haber dado fruto y el Gobierno del Principado ha pactado con el PP una reforma del impuesto, que se implementará por fases y que reducirá sensiblemente la factura. Así, a partir del 1 de junio, se elevará hasta los 300.000 euros -desde los 200.000 actuales- la exención para los familiares directos, lo que, según la estimación de la consejera de Hacienda, supondrá que «el 99 % no pagarán».
Murcia, que recuperó el impuesto de sucesiones en el 2012 por el impacto de la crisis en los ingresos públicos, ha sido otra de las comunidades en anunciar medidas. Aunque está entre los territorios con menor tributación, quiere bonificarlo al 99 %, como Madrid. Canarias lo hace al 99,9 %.