Los exdirectivos del Banco de España informaron a la cúpula de los correos sobre Bankia

Ana Balseiro
a. balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

-El inspector del Banco de España Pedro Comín
-El inspector del Banco de España Pedro Comín MARISCAL | efe

Discutieron con sus superiores el contenido de los mensajes, pero no se los reenviaron

15 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La de ayer fue una jornada clave en el caso de la salida a bolsa de Bankia, que investiga la Audiencia Nacional, ya que Pedro Comín y Pedro González, exresponsables de inspección en el Banco de España en el 2011 y ahora investigados en la causa, declararon ante el juez Andreu sobre los polémicos cuatro correos electrónicos en los que el inspector José Antonio Casaus alertaba de la inviabilidad de Bankia y de los graves perjuicios que supondría sacarla a cotizar. Aunque ambos negaron haber reenviado los correos a sus superiores -creando una teórica barrera de contención de responsabilidades-, González dijo estar convencido de que «la visión del equipo de inspección había llegado» a la cúpula del Banco de España, especialmente al subgobernador, Javier Aríztegui, por la relación más fluida que mantenían y porque el gobernador, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, «estaba más a otras cosas», según explicaron fuentes presentes en los interrogatorios.

Casaus, llamado a declarar

El instructor llamó ayer de urgencia al propio Casaus a que declare, como testigo, mañana mismo.

Comín, que era el destinatario directo de los correos de Casaus y que declaró por espacio de hora y media, restó importancia a las advertencias que contenían. Calificó los mensajes de «opiniones de futuro que contenían errores» y sostuvo que fueron «precipitados» y que «no estaban suficientemente pensados», desmarcándose de sus conclusiones catastrofistas, pese a que acabaron cumpliéndose. Según fuentes jurídicas, defendió que «Bankia estaba en una cómoda situación antes de la salida a bolsa» y que Casaus «se equivocaba en el margen de explotación, porque Bankia ganaba dinero».

El hasta hace un mes director general adjunto de supervisión del Banco de España y coordinador de inspección cuando la entidad salió a bolsa negó haber reenviado los correos recibidos. Sin embargo, pese a no haberlos rebotado ni siquiera a su superior directo, Pedro González, eso no impidió que ambos «analizaran y debatieran su contenido ad nauseam», como explicó.

González respaldó la versión: «No recibí los correos, pero los aspectos más relevantes los hablamos». Dijo que no le constaba que se los hubieran enviado a la cúpula, pero indicó que esta estaba al tanto de su contenido, de la postura crítica del equipo de inspección sobre la salida al parqué de Bankia. Es decir, que los máximos responsables de la institución sabían la situación de la entidad financiera, las objeciones de los inspectores y, aun así, dieron luz verde a la operación.

Falta conocer la versión de Ordóñez y de Aríztegui -también imputados-, que declararán mañana ante Andreu.