La Xunta se convierte en el primer cliente de Rozas con un pedido de 7 drones por valor de 14 millones

m. s. d. REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

FRANCOIS LENOIR | Reuters

Los destinatarios serán distintas consellerías, como Mar o Infraestructuras

24 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La Xunta de Galicia será el primer cliente de su propio proyecto estrella, el CIAR (Centro de Investigación Aeroportada de Rozas, en Lugo) impulsado para regenerar el tejido industrial gallego con un sector tan innovador como el de los aviones no tripulados.

En esta aventura, la Administración gallega va de la mano de dos socios industriales, Indra y Babcock España (antigua Inaer), que están en fase de instalación para el desarrollo de sus divisiones de drones. Pero hay otra parte del proyecto en el que la Xunta, además, se convierte en cliente de estas tecnologías, y esa fase comenzó ayer con el anuncio de la licitación de siete sistemas operativos para aviones no tripulados.

Los destinatarios serán distintas consellerías, como Mar o Infraestruturas, porque los aparatos que quiere tendrán la misión de controlar desde el aire desde los recursos marinos al estado de conservación del patrimonio, pasando por la prevención de incendios forestales.

El desarrollo de estas nuevas tecnologías para drones cuenta con un presupuesto 14 millones de euros (24 millones, cuando culmine la segunda fase). La licitación será en octubre y está abierta a todas las empresas del sector, no solo a las gallegas.

Fuentes del Consorcio Aeronáutica Gallego han confirmado que el sector acudirá a la convocatoria «sin ninguna duda». El conselleiro de Economía, Francisco Conde, explicó ayer en Santiago, ante 300 representantes del ámbito empresarial, social y universitario, que estas 7 primeras licitaciones han sido seleccionadas entre las 149 ideas presentadas desde septiembre del 2015, de las que 104 corresponden a empresas y organismos gallegos.

La convocatoria, que se publicará el próximo lunes en la página web de la Axencia Galega de Innovación (GAIN), facilita la participación de las pymes y de los centros tecnológicos y de investigación gallegos, porque tendrán la posibilidad de formar consorcios para optar a las licitaciones.

Según la Xunta, «se abre una ventana de oportunidades» tanto para las empresas aeronáuticas como para pymes de otros sectores estratégicos como el naval, la automoción y las TIC. «Rozas situará Galicia no solo como pionera en vehículos no tripulados, sino también en la tramitación de los procesos de contratación de los servicios, teniendo en cuenta las necesidades reales de los ciudadanos y lo que pueden ofrecer desde el propio mercado», dijo Conde.