La formación de directivos, clave de las empresas para superar la crisis

M. Hevia REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

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La recesión obligó a abandonar modelos tradicionales por otros más competitivos

19 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Gestionar la incertidumbre y potenciar las habilidades que requiere la toma de decisiones en el ámbito de la empresa constituyen la esencia de una formación cualificada y específica diseñada para los altos ejecutivos. Así lo entiende la dirección de la Escuela de Finanzas, que, en su abanico formativo de posgrado, lleva veinte años instruyendo a profesionales en la gestión de empresas.

En líneas generales, los directivos suelen ser el colectivo al que se dedican la mayor parte de las inversiones para su cualificación. Porque de ello dependen en buena medida los resultados globales de la empresa.

La última crisis económica ha puesto a prueba la trascendencia que en la cadena productiva han supuesto factores como la reducción de la demanda de consumo, el aumento de la competencia y el reajuste de los márgenes de rentabilidad por la caída de los precios.

Y ante semejante escenario, las empresas vieron en la reestructuración de su modelo la fortaleza necesaria para hacer frente al período de debilitamiento económico. Para ello, apostaron por la formación de sus directivos porque se dieron cuenta de que los modelos de dirección tradicionales ya no servían en este proceso, explican desde la Escuela de Finanzas con sede en Oleiros.

El trabajo de un directivo va más allá del impacto en las cuentas de explotación. En su labor, entienden los formadores de altos ejecutivos, deben incluirse aspectos como la empatía, las habilidades de negociación, o la inteligencia emocional; unas cualidades que se potencian por medio de la formación. Tiene, en definitiva, que mantener la constante de negociar, liderar y dirigir y para ello la competencia les exige ser creativos e innovadores. Pero no solo a aquellos que ya ocupan responsabilidades empresariales, sino también a los que sin haber tomado aún contacto con el mercado laboral aspiran a instruirse en este campo.

De hecho, en materia académica la mayoría de los que acceden a un MBA proceden de las áreas universitarias de económicas y empresariales, de las distintas especialidades de ingeniería, las humanidades y la salud, de acuerdo con los perfiles más habituales en las aulas de la Escuela de Finanzas, un referente formativo en Galicia.

Áreas específicas

Las grandes áreas gerenciales que requieren la cualificación permanente de sus altos directivos están focalizadas en los apartados financiero, de estrategia, márketing, control de gestión y comunicación. Porque responden, aseguran los especialistas, a los requerimientos de las diferentes situaciones y escenarios que demanda la economía global.

Sobre las tendencias de cualificación, una de las más extendidas y que incorpora en su programa el MBA de la Escuela de Finanzas gallega es la Harvard Business. Se trata de un programa en el que los alumnos aprenderán a reconocer las habilidades características de los líderes y entenderán sus distintos estilos de comportamiento. Diagnostican los problemas habituales de los equipos de gestión y, al término de su proceso formativo, serán capaces de resolver conflictos intragrupales.

Y estos modelos directivos son trasladables sea cual sea la composición del consejo de administración de una compañía. En el caso de Galicia, con una fuerte implantación de empresas familiares «se necesitan los mismos directivos. Si bien es cierto que, en muchas ocasiones, la organización patriarcal de una firma está más orientada a las áreas de producción que a la gerencial».