La protección por fallecimiento es, después de la del automóvil, la que tiene una mayor cobertura
25 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Galicia se sitúa en la zona alta de la tabla respecto a la penetración de seguros por deceso, según el último ránking difundido por Unespa (Asociación Empresarial del Seguro). De las comunidades autónomas, la gallega está en el séptimo lugar en la rúbrica de este tipo de pólizas que, sobre el grado de introducción, alcanza el 45 % de la población en el conjunto de España.
La patronal del sector acaba de hacer pública la última edición de la Memoria social del seguro y constata que «el seguro juega un papel protagonista en los sepelios en España»; a cierre del 2015, Unespa se hizo cargo del 56,7 % de los decesos registrados en el país durante el citado ejercicio.
De hecho, asegura la organización, la protección por fallecimiento es, después de la del automóvil, la que tiene una mayor cobertura. «Unos 21 millones de personas de los 46,8 millones de residentes en España están protegidos por una de estas pólizas».
Mientras que Extremadura ocupa la primera posición en la disponibilidad de este tipo de servicios, con casi un 68 % de la población, Galicia contabiliza un 50 % de seguros de deceso, que en números se traducen en 488.383 contratos, un 1,13 % más que las contabilizadas un año antes, en el 2014, siendo las provincias de A Coruña (206.622 seguros) y Pontevedra (194.243) las que lideran la tabla en el número de pólizas de las cuatro circunscripciones gallegas. Alejadas de estas cifras se encuentran Ourense (54.553) y Lugo (32.965).
Tipología
También Unespa analizó en su informe la tipología de contratos sobre estos servicios y concluye que son mayoritarias las pólizas familiares e intergeneracionales. Por grupos de edad, el que tiene mayor cobertura es el comprendido entre los 70 y los 74 años de edad, con cerca de un 55 % de protección, seguido por otros grupos de edades entre los 55 y los 85 años en adelante. De hecho en las bandas más jóvenes, ninguna de ellas alcanza el 50 % de contratos, que van aumentando a medida que lo hace también la edad.
Respecto a la prestación de servicios relacionados con sepelios, la memoria de Unespa precisa que la mayoría de las inhumaciones que se produjeron en el 2015 fueron en la misma localidad del fallecimiento y un 30 % fue trasladado a otra localidad española distinta a donde se produjo el óbito.