El BBVA cree que a largo plazo le sobran más de dos tercios de las oficinas

La Voz MADRID / AGENCIAS

ECONOMÍA

XOÁN A. SOLER

El delegado de la entidad cree que podrían llegar a funcionar con solo unas mil sucursales

06 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Apenas unos días después de que el Santander anunciase el cierre de 450 oficinas en España, el consejero delegado del BBVA, Carlos Torres, aseguró el martes en declaraciones a la agencia Bloomberg que la entidad podría acabar funcionando con solo unas mil sucursales. Eso sería, precisó el número dos de la firma que preside Francisco González, cuando los clientes usen más la banca digital. «Tenemos 3.800 oficinas en España. ¿Tiene eso sentido?», se preguntó Torres. Y su respuesta fue: «No. ¿Podemos reducir eso? Sí».

El consejero delegado del segundo mayor banco de España explicó que el BBVA reducirá su red de sucursales de manera continuada durante los próximos cinco años, y que podría acabar trabajando solo con 1.000 de ellas. «En un largo plazo indeterminado, dentro de muchos años», matizó Torres.

Un ERE para 1.120 en CEISS

Por otra parte el Banco CEISS, fruto de la fusión de Caja Duero y Caja España, y propiedad ahora de Unicaja, se reunió ayer con los sindicatos para iniciar un proceso de negociación previo a la reestructuración de la plantilla que quiere acometer y que afectará a un máximo de 1.120 puestos de trabajo. Esto es, a un tercio de los trabajadores.

En esa primera reunión, la dirección de la entidad ha presentado a los representantes de los trabajadores las razones de su reestructuración: garantizar la competitividad a largo plazo y mantener el liderazgo en sus territorios de referencia.

El Banco CEISS cerró el pasado ejercicio con unas pérdidas de 10,7 millones. En el 2014, los números rojos fueron mucho mayores, de 108 millones. CEISS ha recibido 1.129 millones de dinero público: 525 millones los aportó el fondo de rescate (FROB), y el resto fue una inyección de bonos contingentes convertibles (los llamados cocos). Además, Unicaja recibió garantías por importe de 402 millones de euros.