El precio de la vivienda cayó un 0,4 % en el 2015, según las inmobiliarias gallegas
ECONOMÍA
Sube, sin embargo, el precio del alquiler. En seis meses, los pisos para arrendar se han encarecido casi un 2 %
26 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.En Galicia se vendieron el año pasado 12.358 viviendas según el balance presentado ayer por la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias, que constata el incremento de ventas (3,2 %) que avanzaron otros agentes del sector, pero que discrepa en cuanto a la evolución de los precios. Y es que la patronal, echando mano de los datos facilitados por sus asociados, calcula que los valores de venta de los inmuebles en la comunidad cayeron otro 0,4 % el ejercicio pasado.
Y es que, pese a que el mercado empieza a levantar cabeza en las provincias atlánticas, con un tímido repunte de dos décimas en A Coruña y de una en Pontevedra, está lastrado por las caídas en Lugo (0,2 %) y Ourense (0,8).
Con este nuevo descenso, aunque mínimo si se compara con los de años anteriores, el precio medio de la vivienda en Galicia se queda en 1.590 euros por metro cuadrado. El valor máximo, 2.390 euros por metro, se marca de nuevo en la costa, en Sanxenxo, mientras que las urbes más prohibitivas para lanzarse a comprar piso son A Coruña y Santiago, ambas en los 2.100 euros, frente a los 980 de Ferrol, la más asequible.
Lo que sí sube es el precio del alquiler, uno de los segmentos más dinámicos en los últimos tiempos, dadas las restricciones de crédito. Solo en seis meses, desde junio pasado, los pisos para arrendar se han encarecido casi un 2 % en la comunidad, según los datos de Fegein.
El balance de las inmobiliarias gallegas hace una radiografía bastante precisa de las preferencias del mercado -lo más demandado, los pisos de tres dormitorios- como del origen de los compradores -dos de cada tres viviendas dedicadas a segunda residencia se compran desde fuera de Galicia-.
Algo más optimistas, las empresas del sector auguran que este año se notará un acelerón en el crecimiento, aunque no niegan que la incertidumbre política puede suponer un freno, más o menos temporal, a la inversión, que esperan que repunte un 7,1 %. Para conseguirlo, dicen, es imprescindible que se cree empleo y que las Administraciones ayuden, con rebajas e incentivos fiscales para la compra de vivienda.