Nadie es indiferente al conflicto de Ence en Pontevedra, las partes llevan años polarizadas y sin nexos de unión
26 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Pocos son ajenos al conflicto de Ence en la ciudad de Pontevedra. Durante años, defensores y detractores han ido hilvanando un argumentario a favor y en contra para sostener la idoneidad del complejo pastero en la ría de Pontevedra. Empresarios, trabajadores y el Partido Popular ahora (en su día el candidato Telmo Martín llegó a propugnar el traslado de la planta) se han mostrado favorables a la continuidad. Del otro lado, el Concello de Pontevedra y varias asociaciones ecologistas y vecinales de la ciudad han conformado un férreo frente que reclamaba la devolución de los terrenos a su estado original para su aprovechamiento social. Estas son las principales ideas a las que han apelado cada una de las partes durante los últimos años para sostener sus tesis.
A Favor
Más de cinco mil puestos de trabajo en Galicia. Un estudio de la consultora KMPG cifra en más de 5.000 las personas que trabajan en Galicia de manera directa o indirecta gracias a la actividad de Ence Pontevedra. Más de 800 empleos están en la capital, Marín y Poio. Y más de 2.000 puestos de trabajo son exclusivos del sector forestal, lo que representa el 30 % del empleo en el sector de la silvicultura y de la explotación forestal en la comunidad.
Desarrollo rural. Ence, de acuerdo con las conclusiones de varios informes, induce un efecto vertebrador en las zonas rurales con la compra de madera, la gestión de las masas forestales y otras actividades complementarias. Según la empresa, desde el 2010 no ha entrado en Ence Pontevedra ni un solo tronco que no proceda de Galicia (70 %) o del norte de Portugal. Mantiene acuerdos con organizaciones de productores. Ence gestiona unas 11.000 hectáreas de bosques con un modelo de sostenibilidad ambiental. El 54 % de las masas forestales cuentan con certificación FSC y el 86 % con PEFC.
Contribución al PIB. Ence Pontevedra aporta al producto interior bruto autonómico, según los cálculos de KMPG, cerca de 460 millones de euros, un 0,82 % del total. En el ámbito forestal genera más de 166 millones del PIB sectorial, es decir, un 29 % del total.
Vital para el puerto de Marín. Más del 96 % de la producción de pasta de papel del complejo pontevedrés se destinó en el 2014 a la exportación a distintos países europeos. Vital es este tráfico para el puerto de Marín, que cuenta con la única terminal cubierta del norte de España, diseñada expresamente para la manipulación de la pasta de papel. En el 2014 se transportaron por vía marítima desde Marín cerca de 400.000 toneladas de pasta TCF (totalmente libre de cloro) a una decena de países.
Modernización de la planta e inversiones. Pese a los errores cometidos en el pasado en materia medioambiental, hoy en día el complejo de Lourizán es una referencia por sus programas de control tanto de olores como de vapores. Sus responsables están tomando medidas contra el impacto oloroso de la fábrica y también visual.
Inversiones sociales. Ence aporta fondos a entidades educativas y deportivas desde hace años. Forma parte además del patronato de la UNED de Pontevedra y mantiene acuerdos con la Escola de Forestais del campus para crear becas y estimular las investigaciones.
En contra
Olores, humos. Quienes se oponen a Ence subrayan que es una empresa contaminante, condenada por delito ecológico en el año 2002. «Hai decenas de miles de veciños que non pasaron nin un día da súa vida sen aspirar o fume, soportar os cheiros e sufrir a presenza desta industria contaminante a poucos metros dos seus fogares», dice el Libro branco sobre Ence, editado a finales del año pasado por la plataforma antience, que durante los últimos meses ha intentado movilizar a la sociedad para evitar la prórroga.
Además, sostienen los detractores de la pastera que sigue habiendo dos grandes focos de contaminación: sus emisiones al aire y los efluentes líquidos que vierte la fábrica a la ría. Para los opositores al complejo ubicado en la ría de Pontevedra, no existen ni por parte del Estado ni por parte de la Xunta «inspeccións suficientes que garantan realmente os niveis de emisións e o cumprimento da normativa europea ou estatal». Repercusión limitada en materia de empleo. Los opositores afirman que Ence llegó a tener 500 trabajadores en su fábrica de Lourizán, pero que actualmente genera 366 puestos de trabajo directos. Esta cifra supone el 1,1 % del empleo en el municipio de Pontevedra, con 32.564 afiliados a la seguridad Social a finales de año 2015.
Más recursos para la recuperación de la ría. Otro de los argumentos que utilizan los detractores es que la presencia del complejo industrial ha cercenado el aprovechamiento de los recursos naturales de la ría de Pontevedra. Del millar de mariscadores que había hace años, hoy solo queda un tercio. La plataforma contraria a Ence sostiene que si la fábrica abandona la ría, el número de puestos de trabajo que generaría la explotación de los recursos marisqueros y turísticos duplicaría a los que supone la continuidad de Ence.
Suelo gratis. Desde la Asociación pola Defensa da Ría, el Concello y los colectivos que se oponen a la pastera, se subraya que prorrogar la permanencia de una actividad privada en suelo de dominio público marítimo-terrestre supone en la práctica regalar un jugoso negocio de «miles de millones de euros» a la empresa. Además, afirman que es un «agravio comparativo» para otras firma que tienen que competir pagando el terreno que ocupan.
Eucalipto e incendios, mala política forestal. Galicia esta llena de plantaciones de eucalipto para abastecer a Ence, y esta especie incide en la proliferación de incendios.