Soria aplaza la esperada subasta de megavatios eólicos con prima

f. fernández REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

MARTINA MISER

La puja, prevista para septiembre, tiene en vilo al sector en Galicia

06 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Ministerio de Industria se ha abrazado al método de la subasta para adjudicar incentivos públicos en el sector energético. En marcha están desde el año pasado las pujas para otorgar ayudas a las empresas que prestan el servicio de interrumpibilidad y pretende hacer lo propio para conceder nuevas primas eólicas. Pero esta última no acaba de fraguar. En abril anunció que realizaría una subasta de 500 megavatios. Las eléctricas se repartirían 21 millones para construir parques nuevos o sustituir molinos antiguos por otros más potentes (repotenciación). Aunque los megavatios con prima son escasos, la puja supondría el fin de una moratoria decretada en el 2012 con el fin de las primas a las renovables y, por tanto, un intento por parte del Gobierno de dar un bálsamo a un sector herido y paralizado desde hace tres años.

La subasta estaba prevista para septiembre, al menos eso esperaba la patronal eólica, pero el mes ha pasado y la convocatoria no se ha producido. Fuentes de la Asociación Empresarial Eólica (AEE) confirmaron ayer que nada sabían de la puja anunciada y que desconocían cuándo se produciría.

Entre tanto, el sector sigue languideciendo y este año no se ha instalado un solo megavatio eólico en toda España. Algo parecido ocurrió ya en el 2014, cuando solamente entró en operación un parque comercial (no experimental). Lo hizo en Galicia, impulsado por Gas Natural Fenosa. Se trata del Cordal de Montouto, de 14 megavatios instalados, que funciona sin prima alguna. Y el panorama no tiene visos de mejorar a menos que el ministerio desbloquee los incentivos. Aunque desde el sector resaltan que no se trata únicamente de recibir o no primas a la producción, como hasta hace tres años, sino más grave es la inseguridad jurídica que padece el negocio. Las primas fueron sustituidas por una retribución que, según el Gobierno, garantiza una rentabilidad razonable a los parques, que en la actualidad está establecida en el 7 %. Las instalaciones anteriores al 2005 -la mayoría de las que están asentadas en Galicia- no perciben ni esa compensación, al entender el ministerio que los promotores han tenido tiempo suficiente de amortizar la inversión. Pero Industria también decretó que esa retribución se revisará cada seis años. Y es aquí donde el sector ve el peligro porque un inversor no se animará a realizar un fuerte desembolso económico para construir un parque si no tiene garantía de lo que va a percibir durante varios años.

Fuentes de la AEE indicaron hace unos meses que por esto ven «complicado y difícil» que los promotores eólicos se animen a realizar inversiones si dentro de cuatro años pueden cambiar las condiciones económicas.

De la convocatoria de la subasta eólica están pendientes empresas como Gas Natural Fenosa, que tiene en proyecto repotenciar el parque de cabo Vilán. Invertirá seis millones.

Mil empleos menos en el 2014

La crisis eólica se ve en que no aparecen parques nuevos y en que cierran fábricas de componentes. Según datos aportados por la asociación de productores de energías renovables (APPA), el sector destruyó el año pasado en toda España 1.097 empleos. Este descenso se suma a los registrados en los últimos seis años, durante los cuales perdió más de 24.200 puestos. En el 2014 empleó a 16.753 personas (9.466 de forma directa), lo que supone un 60 % menos de trabajadores que en el 2008, año en el que se alcanzó la mayor cifra de la serie analizada con 41.438.