Los ganaderos de Lugo ponen fin a la tractorada en protesta por los actos vandálicos

X. MELCHOR / D. CELA / S. GONZÁLEZ

ECONOMÍA

El secretario del sindicato Asaja califica como «un despropósito, una locura y un flaco favor al sector» que los tractores se hayan instalado en las plantas para controlar la ruta de la leche

12 sep 2015 . Actualizado a las 23:23 h.

Los ganaderos de Lugo levantaron durante la tarde del sábado la tractorada que mantenían en la ciudad desde hace diez días. Lo anunciaron en rueda de prensa a través de su portavoz, Roberto López. A las 16.00 horas se celebró una asamblea para comunicárselo al resto de ganaderos que rodeaban la ciudad y poco a poco han ido abandonando Lugo por las cinco rutas establecidas. El fin de la tractorada está provocado por el desacuerdo de los ganaderos con los actos vandálicos ocurridos en las últimas horas por parte de grupos descontrolados que apoyan el bloqueo a la industria. Entre otros ha habido incidentes en varios supermercados de Lugo y ante la fábrica de Leche Río en O Ceao, donde han roto un antiguo carro instalado en la parte ajardinada de la factoría.

Los ganaderos se replegaron a la espera de cómo evolucione el preacuerdo que adelantó anteayer el ministerio de Agricultura. Aseguran que si a finales de octubre no ha habido avances en sus reivindicaciones volverán a bloquear Lugo.

Bloqueo a las industrias

Los ganaderos han dado otra vuelta de tuerca en su lucha por precios justos para la leche. El nuevo foco de su protesta se ha puesto en la industria láctea, a la que acusan de haber sido la más intransigente con sus demandas en la reunión sectorial celebrada el pasado jueves en Madrid. Tras acordarlo en varias asambleas, los tractores comenzaron a movilizarse a última hora de la tarde del viernes para dirigirse a las quince factorías que existen en Galicia. El sindicato Asaja-Xóvenes Agricultores no apoya estas medidas, y se desvincula totalmente de ellas. Es la primera baja en el frente sindical.

Los tractores bloquearon las principales industrias lácteas lucenses. Desde antes de las cinco de la madrugada los tractores impidieron que entraran o saliesen vehículos de las dos plantas de Leche Río en O Ceao. Casi de forma simultánea era la fábrica de Larsa, en Robra, la que recibía la visita de los piquetes. En el polígono industrial lucense vaciaron un camión de Gadis y los cartones de leche quedaron tirados en la rotonda. Los concentrados pararon y revisaron también camiones de Eroski. En Rábade derramaron una cisterna de leche.

Los ganaderos que bloquearon las industrias lucenses pertenecen en buena medida a la provincia de A Coruña. También se desplazaron productores lucenses, descontentos con la decisión de última hora de la Marea Leiteira, que durante la mañana del sábado acudió a los centros de distribución y partidarios de una radicalización de las protestas. Algunas industrias como Reny Picot anunciaron el viernes a sus ganaderos que el sábado no habrá recogida y adelantaron su paso por las explotaciones, en previsión de posibles incidentes.

Las principales empresas lácteas de la comarca de Santiago estaban bloqueadas desde la noche del viernes por los ganaderos, que se concentraron ante las puertas de Feiraco en Pontemaceira (Negreira), Lácteos Pérez en A Pereira (Santa Comba) y Lasurgal, en el polígono industrial de Melide para impedir la salida y entrada de leche.

El acceso a la fábrica de Nestlé en Pontecesures fue rodeado por una veintena de tractores de Rodeiro, Lalín, A Estrada y Silleda. Sus propietarios no estaban dispuestos a ver cómo la industria y las políticas de precios malogran una actividad centenaria en Galicia. «Isto temos que solucionalo si ou si», afirmaba uno de sus portavoces. De momento, el Concello cesureño ya ha mostrado su solidaridad con el sector. La alcaldesa, Cecilia Tarela, ordenó la apertura del anexo del pabellón municipal de deportes para que los manifestantes puedan ducharse y descansar. También están bloquedas las factorías de Larsa y Clesa.

Una treintena de ganaderos se concentraron ante la cooperativa Icos en Silleda a media mañana tras tener conocimiento de que había varios camiones de recogida de Reny Picot cargados. A mediodía los ganaderos abrieron cuatro tanques de tres camiones, uno de ellos un remolque, que en total rondaban los cuarenta mil litros segun precisó uno de los camioneros

Según uno de los portavoces de la organización de Santa Comba, Anxo Escariz, se logrado bloquear la ruta de reparto de la leche «al 100% en las provincias de A Coruña y Pontevedra y sobre el 60% en Lugo».

Asaja Galiia se desmarca del bloqueo

Asaja Galicia ha lamentado y se desmarca de las acciones de «pequeños grupos aislados de ganaderos» que estaban bloqueando la industria láctea. En un comunicado, recuerda la postura de su ejecutiva de que «el documento presentado el jueves en Madrid por la Ministra de Agricultura es la mejor y más completa propuesta de acuerdo para el sector lácteo de la historia». Su secretario general, Francisco Bello, ha criticado en declaraciones a Efe la situación que se está produciendo.«Es un despropósito, una locura y un flaco favor al sector», concluyó.

En su opinión, no es serio que se hayan iniciado estas acciones cuando no hay ningún tipo de acuerdo desde la plataforma de defensa del sector, que integran sindicatos y otras organizaciones agrarias.

Las empresas de distribución de alimentos también están en el punto de mira de los ganaderos, aunque ahora como objetivo secundario. La intención es continuar con el bloqueo del centro logístico de Dia en Santiago, aunque aliviándolo para permitir el tráfico de mercancías que no sean leche o productos lácteos, y llevar a cabo acciones idénticas en los almacenes que tienen Vegalsa (que opera con las marcas Eroski y Familia) en Sigüeiro (Oroso) y Gadisa (Gadis, Claudio e Ifa) en Betanzos, ambos en la provincia de A Coruña.

En principio, la decisión de movilizar parte de los tractores desplegados en Santiago y Lugo para bloquear las industrias lácteas aliviará los cortes de vías que padecen estas dos ciudades, especialmente la capital gallega. El secretario xeral del sindicato Unións Agrarias, Roberto García, explicaba ayer que la medida era necesaria para evitar que los ciudadanos sigan padeciendo graves trastornos por las protestas.

En cambio, se mantiene el cerco a la sede principal de la Xunta en Santiago. San Caetano seguirá así rodeado por tractores para seguir presionando a la Administración, especialmente al Gobierno gallego.