Marzo registra un récord en todo el país por la devaluación del euro
21 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Después de que en el año 2013 el buen comportamiento del sector exterior gallego permitiese mitigar las embestidas más duras de la crisis, el 2014 se significó por una marcada desaceleración de las exportaciones, lo que propició un diferencial negativo de crecimiento del PIB de Galicia respecto a España. Enero arrancó con un descenso, pero en febrero de este año, tras cuatro meses de caída, las exportaciones repuntaron gracias a la automoción. Los datos de marzo, divulgados ayer por el Ministerio de Economía, sitúan a Galicia de nuevo con un decrecimiento interanual en sus ventas al exterior del 1,9 %, frente a un aumento del 12,5 % en España. Las exportaciones sumaron en el conjunto del país 23.218,3 millones de euros, cifra récord en un mes, empujadas, en gran medida, por la depreciación del euro.
La radiografía del conjunto del año, es decir, del primer trimestre, aporta una visión con mayor perspectiva y que revela que el motor exportador gallego no termina de arrancar con fuerza en este 2015. Entre enero y marzo, las empresas de la comunidad han colocado mercancía en el exterior por valor de 4.362,3 millones de euros, un 1,2 % más respecto al mismo período del 2013, pero una cifra que representa un crecimiento que es casi cuatro veces menos que el contabilizado en España. El conjunto de las comunidades se anotan un 4,5?% de subida. Esto se explica, en gran parte, por el mal comportamiento del sector de la automoción en Galicia, que aunque repuntó el pasado mes de febrero, en el conjunto del trimestre registra una caída interanual de las exportaciones del 9,9 %.
Mientras tanto, el textil contabiliza una subida del 13,4 %, gracias al tirón de Inditex, la multinacional con sede en Arteixo. En otras autonomías en las que pesa la automoción, como es el caso de Cataluña, Aragón o Castilla-La Mancha, el saldo exportador es mucho más positivo. Pero al mal dato de marzo también contribuye un descenso del 5,9 % en las ventas exteriores de los bienes de equipo. Es decir, que no todo es atribuible a lo que sucede en Citroën y en su entramado industrial. Y apuntaría otra tendencia: mientras la demanda interna se reactiva en otras comunidades, sobre todo con una tímida mejora de la construcción, en Galicia sigue todavía muy contraída.
Mejores perspectivas
Preguntada ayer por el balance trimestral del Gobierno, la Consellería de Industria se mostró optimista. «Os datos amosan un bo impulso do tirón exportador de Galicia grazas ao esforzo das empresas: estamos convencidos de que no 2015 imos camiño de bater un novo récord», asegura el departamento que lidera Francisco Conde. La Xunta se muestra convencida de una mejora en los próximos meses porque PSA acaba de anunciar una producción por encima de los 400.000 vehículos en su planta viguesa de Balaídos (el año pasado fueron 380.000). A esto se suma, según el Gobierno gallego, que la industria de componentes ha cerrado nuevos contratos con fabricantes alemanes de primera línea, como es el caso de Copo; y que el naval «está a marcar un paso de crecemento renovado, con estaleiros como Freire o Navantia abordando novos contratos», recuerda Industria.
A la espera de ver qué sucede durante el próximo trimestre, lo cierto es la que la Xunta dibujó en el cuadro macroeconómico del presupuesto autonómico para este 2015 un crecimiento de las exportaciones del 6,6 % para el conjunto del año. El ritmo actual muestra que, hasta ahora, las ventas al extranjero estarían aumentando solo la tercera parte de lo previsto por el Gobierno gallego a finales del 2014.
Por su parte, Industria recuerda que durante el primer trimestre del año la balanza comercial -diferencia entre lo que se compra y vende en los mercados exteriores - aumentó un 3, 8 % en relación al mismo período del año anterior.
Un sector con enormes desequilibrios
La evolución del sector exterior de la comunidad vuelve a poner en evidencia la enorme dependencia que tiene Galicia de la salud de dos gigantes como son Inditex y Citroën. La multinacional textil ha mostrado una enorme fortaleza a lo largo de la crisis, pero no ha ocurrido lo mismo con la automoción, sobre la que se proyecta ahora un horizonte con muchas más luces que sombras.
Esto pone sobre la mesa uno de los principales desequilibrios del sector exterior de la comunidad. Y no es otro que el déficit de empresas exportadoras. Un problema que se agravó en el año 2014, tal y como consta en el último informe de coyuntura económica del Foro Económico de Galicia (FEG); la comunidad cerró el pasado ejercicio con 6.235 compañías que colocaban su mercancía en los mercados internacionales, un 2,3 % menos de las que había a finales del 2013.
En relación al peso que tiene la economía gallega en el conjunto de España, Galicia debería contar con unas 1.200 empresas exportadoras más. A esto se suma un segundo problema, directamente relacionado con el anterior: una escasa diversificación geográfica. Más del 65 % de lo que venden las compañías de la comunidad en los mercados internacionales tiene como destino países de la Unión Europea. Galicia tiene una escasa presencia en los mercados emergentes mundiales, muy atractivos en un contexto de desaceleración de la eurozona. La cuota exportadora a los llamados BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) es residual.
Plan de choque
En aras de corregir este y otros desequilibrios, la Xunta ha puesto en marcha la Estratexia de Internacionalización da Empresa Galega 2020, un programa en el que invertirá entre este año y el que viene unos 50 millones con el objetivo de incrementar las exportaciones un 25 %.
El Gobierno gallego pretende que al finalizar el próximo lustro la aportación del sector exterior al PIB de la comunidad alcance el 40 % y que Galicia cuente con unas 8.000 empresas exportadoras, casi 1.800 más de las que existen en la actualidad.