La gran banca coincide en que este año sí abrirá el grifo de la financiación

Ana Balseiro
ana balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

Pilar Canicoba

El sector, convencido de la legalidad de los créditos fiscales que investiga la UE

09 abr 2015 . Actualizado a las 15:20 h.

Esta vez parece que sí. En el 2015 habrá al fin un crecimiento neto del crédito después de siete años en dique seco. Que la banca volverá a dar financiación, imprescindible para la recuperación económica, fue un aspecto en el que coincidieron ayer los consejeros delegados de los principales bancos del país, que participaron en la jornada de apertura del tradicional encuentro anual del sector financiero en Madrid.

Los primeros ejecutivos de Santander, BBVA, Bankia, Popular y Sabadell se mostraron -solo Caixabank auguró un crecimiento en torno al cero- convencidos del despegue de la financiación en este ejercicio, y su opinión es un indicador nada desdeñable, ya que las seis grandes entidades, todas cotizadas, concentran alrededor del 70 % de toda la cartera de crédito del país en familias y empresas.

El nuevo consejero delegado del Santander, José Antonio Álvarez, puso cifras a sus planes y explicó que la entidad confía en incrementar su cartera crediticia en todos los mercados en los que opera: entre el 3 % y el 6?% en los países maduros (aquí se encuentra España), y a tasas de doble dígito en los emergentes.

El discurso del optimismo lo continuó su homólogo en Bankia, José Sevilla, que manifestó que el objetivo de la entidad es elevar «más de un 10 % el saldo de crédito a autónomos, pymes y consumo». Esto se traducirá en unos 3.000 millones de euros, que se sumarán a los 30.000 que ya canaliza este segmento, que supone algo más de un cuarto del total de préstamos.

Francisco Gómez, del Popular, espera igualmente un «ligero crecimiento del crédito neto» este año, mientras que el consejero delegado del BBVA, Ángel Cano, se mostró más cauto, al considerar que no habrá incrementos significativos hasta 2016, además de subrayar que será «difícil» recuperar la rentabilidad del negocio bancario a niveles precios a la crisis.

A medio plazo

El menos positivo respecto al crédito fue el primer ejecutivo de Caixabank, Gonzalo Gortázar, que aunque estimó que crecerá en el entorno del 2 % en los próximos cuatro años, este ejercicio aún se moverá en el entorno del cero o registrará «una ligera caída».

El encuentro, que aborda la situación de la banca española ante la integración bancaria europea, también sirvió para constatar la «tranquilidad» de las principales entidades ante el anuncio de que la Comisión Europea investigará los activos fiscales diferidos (DTA por sus siglas en inglés) garantizados por el Estado en el 2013 y que podrían hacerles un roto milmillonario.

Críticas a Linde por defender como «patriotismo» las políticas de austeridad del PP

El discurso con el que el gobernador del Banco de España, Luis María Linde, inauguró el vigésimo segundo Encuentro del Sector Financiero levantó ayer críticas en diferentes ámbitos. Y es que, abandonando su mesura tradicional, Linde defendió la política de austeridad del Gobierno calificándola de «patriotismo», algo que no tuvo buena acogida entre la oposición, banqueros presentes en la jornada, algún analista e incluso un miembro del consejo del propio Banco de España. Algo extraordinariamente infrecuente, como también las palabras de Linde, un gobernador bastante precavido.

«Apartarse de un camino que nos lleve a situaciones imposibles e insostenibles no es austeridad sino sentido común y, en un sentido muy real, patriotismo», aseguró el gobernador en la parte final de su intervención, en la que también recordaba que «la corrección de los grandes desequilibrios es, inevitablemente, muy costosa en términos de empleo y bienestar y esta es la enseñanza que podemos sacar de la gran expansión que termina en el 2008, cuando estalla la burbuja inmobiliaria».

Su apelación al patriotismo para defender la política del Ejecutivo se encontró con la desaprobación de Guillem López Casanovas, consejero del Banco de España. «No es correcto usar el término patriotismo», declaró a la agencia Bloomberg, añadiendo que «demasiadas veces el término se ha usado inadecuadamente para ignorar algunas realidades internacionales por el bien supremo de la nación».

«Poca vergüenza»

Desde las filas del PSOE las críticas arreciaron. Vía Twitter el secretario de Política Federal del partido, Antonio Pradas, aseguraba que «hay que tener poca vergüenza y nula humanidad» para defender los recortes como patriotismo. Le siguió el responsable de Economía de ese mismo partido, Manuel de la Rocha. Negaba que fuera patriotismo «destruir el Estado del bienestar recortando derechos laborales, añadiendo copagos o acabando con becas, reduciendo las prestaciones por desempleo, etcétera».

También recordó a Linde que el Gobierno no evitó el rescate: «España fue rescatada en el 2012 a través de un programa de asistencia para el sector financiero que costó 40.000 millones de euros. Una realidad muy distinta de lo declarado por el máximo responsable del Banco de España».

De la Rocha instó al gobernador a ser «más prudente y objetivo en sus declaraciones a favor del Gobierno, pues está comprometiendo la credibilidad e independencia de la institución».