Lence dice que se libró de la sanción «porque no estamos en ese rollo»

X. M. P., D. C. LUGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Lactalis asegura que actuó dentro de la legalidad y que recurrirá la multa

05 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las reacciones de la industria láctea gallega a la resolución de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) no se han hecho esperar. El consejero delegado de Leche Río, Jesús Lence, calificó ayer de «sinsentido» y «despropósito» las sanciones impuestas a otras empresas del sector. El industrial lucense dijo que, si bien le habían comunicado el inicio del expediente, todavía no recibió notificación alguna de que en su caso, al igual que en el de Feiraco, la infracción ha prescrito. El grupo Lactalis, por su parte, anunció que está analizando la resolución que le impone una multa de 11,6 millones, con la intención de recurrirla.

La Asociación de Empresas Lácteas de Galicia, con 100.000 euros de sanción, también valora la posibilidad de interponer recurso. Su gerente, Pedro Ramos, señaló que estaban a la espera de las consideraciones del abogado que los representa para tomar la determinación. Ramos señaló que en Aelga están «frustrados, indignados y perplejos con lo que ha ocurrido». Apuntó que esta organización nunca intervino en acuerdos o pactos para el sector, salvo en las negociaciones con las administraciones públicas, como es el caso de la Mesa do Leite.

«Vamos por libre»

Jesús Lence insistió que abandonó la Asociación de Empresas Lácteas de Galicia ya hace tiempo. «Nosotros no estamos en ese rollo. Vamos por libre», insistió el industrial lucense. «No estamos -abundó- en ninguna asociación del sector en Galicia, lo dejamos hace tiempo». Lo hizo poco después de que se abriera el expediente a las industrias lácteas por parte de la CNMC. Ahora Lence pertenece a la Fenil, la patronal nacional del sector.

El consejero delegado de Leche Río insistió que las sanciones a las industrias lácteas llegan en un momento muy crítico por la supresión de las cuotas lácteas. «Estamos pensativos -apuntó- porque se nos presenta un presente incierto. En Galicia no hemos preparado la asignatura y no la vamos a aprobar». «Vamos a tener un problema muy gordo con los costes de producción, tanto la industria como el ganadero, porque no hemos resuelto los problemas del territorio», añadió Jesús Lence.

Lactalis, dentro de la legalidad

Por su parte, fuentes del grupo Lactalis señalaron que han observado «en todo momento la legalidad» e insistieron en que se trata de un grupo «muy comprometido con el cumplimiento normativo, por lo que estamos sorprendidos por la resolución y en desacuerdo con la misma». Desde la industria, de capital francés, recordaron que la resolución no es firme y destacaron su intención de plantar batalla: «La estamos analizando con intención de recurrirla».

A la ministra de Agricultura le preocupa que la sanción lleve a la quiebra a alguna industria

La ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, mostró ayer su preocupación por cómo pueda afectar la multa impuesta por la CNMC a la viabilidad de las industrias lácteas sancionadas y que esta pueda repercutir negativamente también en los ganaderos. «Espero que esto no tenga consecuencias severas para estas industrias y acabe siendo perjudicial para los 17.000 ganaderos», señaló.

En todo caso, Tejerina remarcó que «la CNMC es un órgano independiente donde nosotros [el Gobierno] en absoluto interferimos». Según la ministra, ahora la industria «tiene que ver si está conforme o no» con la sanción del regulador y recordó que «hay procedimientos para que la recurran».

Tejerina defendió las medidas del Ejecutivo para ordenar las relaciones entre productores e industria, como el paquete lácteo, para que haya contratos a largo plazo y firmados antes de que haya entregas, y la Ley de la Cadena Alimentaria, una norma «disuasoria» contra las prácticas abusivas porque, dice, «yo no quiero poner multas por poner multas».