Nuevas reglas de juego para la leche

Xoán Ramón Alvite Alvite
xoán ramón alvite REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

MARCOS MÍGUEZ

El paquete lácteo incluye la obligatoriedad de contratos de un mínimo de un año de duración y garantiza la compra de todo el producto pactado

03 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras la aprobación de la modificación del llamado paquete lácteo por parte del Consejo de Ministros, los ganaderos gallegos tienen desde el viernes pasado una nueva herramienta que, en teoría, permitirá aumentar su poder negociador ante la industria. Un conjunto de medidas que buscan dar mayor transparencia y estabilidad a la cadena de valor de la leche y que, pese a todo, son vistas con cierta incertidumbre por parte del sector productor que teme que empresas y distribución sigan haciendo valer su posición de dominio e intenten seguir imponiendo sus condiciones.

Contratos obligatorios

El quid de la cuestión. Probablemente se trate del punto más importante de todo el paquete lácteo. No solamente serán obligatorios sino que las industrias deberán realizar una oferta de contrato con una duración mínima de un año, al menos dos meses antes de la finalización del que ya esté en vigor y, en cualquier caso, en contratos nuevos dos meses antes del inicio de las entregas de leche. Las sombras vienen dadas por la posibilidad de que sean los propios ganaderos los que renuncien de forma explícita a esta duración anual. Desde distintas organizaciones de productores temen presiones por parte de las industrias lácteas a los productores para ejecutar este derecho y seguir imponiendo sus precios y condiciones de entrega. Con la nueva norma resulta imposible aplicar modificaciones sobre las condiciones pactadas para la leche ya entregada.

Mediador

Una figura diluida. La nueva normativa aprobada por el Consejo de Ministros no recoge esta figura, salvo en el caso de que no se llegue a un acuerdo entre una determinada organización de productores y la industria receptora de la leche en aspectos como el precio o el volumen de leche objeto del contrato. Supuesto este en el que ambas partes, siempre y cuando se cumplan determinadas condiciones, como la existencia de una oferta previa por escrito, podrán acogerse de mutuo acuerdo a un sistema de mediación. Un buen número de ganaderos demandaban que esta figura fuese obligatoria e incluida en la reforma.

Precios

Fijo, variable o mixto. Desde varias organizaciones profesionales se señalaba la necesidad de que los precios recogidos en los contratos estuvieran referenciados a distintas variables o se calculasen en función de determinados índices (sindicatos como Unións Agrarias optaba directamente por el puesto en marcha por la Universidad de Santiago) aspecto que tampoco se cumplirá. La nueva normativa permitirá que el precio que se pacte sea fijo, variable o bien mixto y que se puedan incluir además un ajuste en función de primas dependientes de factores como el volumen suministrado o la calidad higiénico-sanitaria. Este aspecto ha desatado las críticas de Unións Agrarias, que lamenta que el nuevo decreto no vaya a garantizar la recogida de la totalidad de la leche producida a un precio de mercado, por lo que piden que los importes nunca sean inferiores a los costes generados durante la producción.

Garantizar la recogida

La venta, asegurada. Con esta modificación legislativa que ya lleva dos días en vigor se garantiza de forma explícita la recogida de toda la leche producida y recogida en el contrato siempre y cuando no se supere un índice de tolerancia del volumen del 10 %. Es decir, los ganaderos tienen asegurada la venta de la misma cantidad de leche producida en esta campaña y deben negociar con las lácteas futuros incrementos.

Más controles

Reforzar el seguimiento. El nuevo paquete lácteo recién aprobado por el Gobierno también establece un plan de controles oficiales apoyado en el régimen sancionador de la ley 12/2013 de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, de aplicación también a los contratos lácteos, que permitirá reforzar el seguimiento y cumplimiento de las disposiciones del real decreto. También se establece la mejora del sistema de registro y monitorización de los contratos lácteos, mediante la creación de una única base de datos de declaraciones en el sector, que relacionará cada entrega de leche con su contrato correspondiente.