Navantia inicia en Fene el primer buque para la Marina desde el 2006

Beatriz García Couce
beatriz couce FERROL / LA VOZ

ECONOMÍA

El acto de cortado de la primera plancha de acero contó con representantes de la Marina y Navantia.
El acto de cortado de la primera plancha de acero contó con representantes de la Marina y Navantia.

La antigua Astano comenzó la obra pero el montaje se efectuará en Ferrol

06 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Nunca antes había pasado tan poco tiempo entre la firma de la orden de ejecución de un buque para la Armada española y el inicio de su construcción. Pero ayer se produjo. En torno a la una de la tarde, el director general de Armamento y Material del Ministerio de Defensa, Juan Manuel García Montaño, y el presidente de Navantia, José Manuel Revuelta, sellaron en Madrid el encargo de construcción de dos Buques de Acción Marítima (BAM) y solo unos minutos después se inició simultáneamente su fabricación en los astilleros de Fene y San Fernando (Cádiz). Es un encargo que rompe la sequía de ocho años sin pedidos de la Armada, afectada por los recortes presupuestarios, a los astilleros públicos.

La ceremonia de cortado de la primera plancha de acero del bloque de quilla del buque también tuvo un carácter especial en la ría ferrolana, por cuanto se produjo en el astillero de Fene, que llevaba sin actividad desde hace más de un año.

El contrato, que refleja que los trabajos se prolongarán hasta el 2018, tiene un presupuesto de 333,48 millones de euros y supondrá 2,2 millones de horas de trabajo.

Se trata de dos nuevas unidades, que vendrán a sumarse a las cuatro ya operativas, aunque incorporan mejoras encaminadas a la disminución del peso, nuevos equipos y estarán adecuados para albergar a una dotación mayor que sus antecesores. Es un navío de tamaño medio y está diseñado para prestar múltiples misiones, como control del tráfico marítimo, escolta de otros barcos, operaciones contra el narcotráfico y apoyo a situaciones de crisis y ayuda humanitaria.

Con este pedido, Navantia asume el reto de «reducir el plazo de construcción», según aseguró Jaime Vidal, director del programa de los BAM, además de «construir dos buques idénticos en dos centros distintos y de forma paralela».

Críticas por el flotel

Aunque la obra se inicia en el astillero de Fene, los sindicatos han venido advirtiendo en las últimas semanas de que los trabajos no tendrán la misma continuidad que anteriores programas y no será hasta el primer trimestre del próximo año cuando se eleve la actividad. No obstante, viene a sumarse a la ejecución del buque flotel para Pemex, que se está fabricando en Ferrol, astillero en el que se montará el BAM. De hecho, los retrasos en el flotel han sido objeto de cruces de acusaciones esta semana entre el comité ferrolano y la dirección de la empresa. Ayer, los representantes de los trabajadores de la antigua Bazán criticaron que la compañía les culpabilice de esa demora, que achacan a «una organización por programas ineficaz, centralización na toma de decisións que apartan a solución dos problemas dos verdadeiros coñecedores da actividade» y a la subcontratación fallida, entre otros.