Armadores gallegos exigen a la UE que vuelva a permitir el «finning»

f. f. REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Arguyen que no tiene sentido aplicar una medida tumbada por los asiáticos

19 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

A la vista de que la Comisión Europea ha vuelto a fracasar en su intento de extender la prohibición del finning -cortar las aletas del tiburón a bordo para quedarse solo con ellas y desechar el resto del cuerpo- a todas las flotas, «no tiene sentido» que esa medida siga en vigor en Europa. Es lo que defiende la Cooperativa de Armadores de Pesca del Puerto de Vigo (Arvi), que exige que la Comisión revierta «urgentemente» la prohibición, en vigor desde hace año y medio, ya que «solo limita la actividad de las flotas española y portuguesa» y «resta competitividad a la comunitaria».

La flota europea está obligada a descargar los escualos enteros y manipularlos en tierra.

La Confederación Española de Pesca (Cepesca) también anunció que solicitará oficialmente a la Comisión Europea que revoque la prohibición del finning. A la espera de lo que decida -las posibilidades de éxito son escasas, reconocen desde la organización-, Cepesca avanza que no se rinde y que el año que viene volverá a pelear en la Conferencia Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) para que las flotas asiáticas apliquen la misma normativa comunitaria.

Esa convención, en la que participaron 49 países, acaba de tumbar la propuesta que defendía la Comisión Europea a instancias de países como España. La presión ejercida por China y Japón, especialmente, fue suficiente para que la prohibición del finning ni siquiera llegase a ser votada. Edelmiro Ulloa, secretario técnico de la cooperativa viguesa, explicó que en la ICCAT no son frecuentes las votaciones. Aunque precisó que en otras ocasiones sí se forzaron para lograr sacar adelante una iniciativa. Esta vez no fue así y tanto armadores como Cepesca están indignados con la escasa capacidad negociadora de la Comisión.

Solo interesa a España y Portugal

Quizá en esto tenga mucho que ver con que los principales países europeos que pescan tiburones sean España y Portugal. Frente a ellos, hay otros más poderosos, como Gran Bretaña, Alemania o Suecia, que están decididos a proteger esa especie, en parte porque sus flotas no se dedican a su captura, explica Ulloa.

En España, algo más de 200 palangreros de superficie gallegos pescan escualos. Los cuerpos se comercializan en el mercado nacional y se exportan también a Sudamérica. Las aletas en cambio se van todas al mercado chino, concretamente al de Hong Kong.

Tal y como recuerda Ulloa, en Europa ya no se practicaba el finning, aunque la Comisión Europea decidió prohibir esta práctica con el objetivo de que se hiciese extensiva a las flotas asiáticas, que sí cercenan la aleta a bordo y desechan directamente el resto del tiburón.