Pablo Hernández de Cos, director de análisis de política económica del Banco de España y miembro de la comisión de expertos para la reforma fiscal, confesó ayer que, en este momento, -cuando ya están prácticamente perfiladas las nuevas normas de tributación-, todavía defiende las líneas generales aportadas por la denominada comisión Lagares, que proponía unas medidas encaminadas a incrementar la competitividad del país, quebrar con la dinámica del incremento de la deuda e incrementar los niveles de empleo.
Hernández de Cos, que partició en A Coruña en un curso de la UIMP titulado «La reforma fiscal que viene», subrayó que España debería incrementar la recaudación del IVA, impuestos especiales y mediambientales, al tiempo que reducir las cotizaciones sociales (en un punto de PIB, propuso), lo que tendría efectos positivos en el empleo. Ofreció un dato alarmante: el desempleo puede llegar a ser estructural, teniendo en cuenta que el 60 % de los parados llevan más de un año sin encontrar trabajo.
Uno de los problemas para subir el IVA es que la mayor parte de los productos con el tipo superreducido son los que conforman buena parte de las familias con escasos recursos.