Banesco amplió capital en 100 millones el mes en que cerró la compra de Abanca

r. s. REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

El capital social del holding se queda ahora en 282,5 millones de euros

23 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Banesco Holding Hispania, el grupo que preside Juan Carlos Escotet y a través del cual ha articulado sus inversiones en España, ejecutó en el mes de junio una ampliación de capital de 100 millones de euros que suscribieron en su integridad los principales accionistas del grupo, según fuentes conocedoras de ese movimiento.

La operación, que esta semana quedó oficializada en el Registro Mercantil, se realizó para «reforzar el capital del grupo financiero», según las mismas fuentes, y se llevó a cabo el mismo mes en que Banesco tomaba, definitivamente, el mando de Abanca (entonces Novagalicia Banco), tras recibir el visto bueno de la Comisión Europea a la compra del mayor grupo bancario de Galicia. De esta forma, el capital social del holding se queda ahora en 282,5 millones de euros. El primer pago por Abanca se ejecutó un poco antes de esa ampliación, en mayo; depositó entonces 403 millones de euros para el FROB. Los 600 millones restantes los pondrá en varios plazos hasta el 2018.

Las mismas fuentes precisaron que esa ampliación no cambia la composición de ese holding, en el que destaca Juan Carlos Escotet, que tiene alrededor de un 80 % del capital. El resto lo conforman sus socios Luis Xavier Luján y Miguel Ángel Marcano. En el holding, que tiene su sede en Madrid, figura como vicepresidente Salvador Eduardo Cores, quien en su día fue consejero en el Banco Etcheverría, también participado por Banesco, y que se integrará en Abanca a mediados de noviembre.

La cúpula de Banesco realizó hace unos semanas otro desembolso importante. Escotet y sus dos socios principales pagaron 111,8 millones por el 41,5 % de los bonos convertibles que emitió el propio Banesco para Abanca. Las fuentes consultadas no han precisado si hay vinculación entre los dos movimientos. El caso de esas convertibles supone el primer paso para que la entidad gallega pueda salir a bolsa a medio plazo, porque son bonos que se convertirán en acciones en el 2019 como muy tarde.