Muere el exministro Miguel Boyer

La Voz / Agencias

ECONOMÍA

Atlas TV

El extitular de Economía y Hacienda ingresó esta mañana en la clínica Ruber por una embolia pulmonar

29 sep 2014 . Actualizado a las 21:56 h.

El exministro socialista, Miguel Boyer, falleció en la clínica Ruber Internacional, donde ingresó de urgencia esta misma mañana, según informan a Europa Press fuentes cercanas a la familia. Boyer había entrado por urgencias en estado crítico a causa de un tromboembolismo pulmonar, de acuerdo con el parte médico emitido por el hospital a petición de la familia.

Sus restos mortales han abandonado el Hospital Ruber Internacional a las 14.23 horas de esta tarde hacia el Tanatorio Parque San Isidro. Momentos antes abandonaban el lugar su viuda, Isabel Preysler, y su hija Ana Boyer, según informa Europa Press.

El exministro socialista Miguel Boyer será enterrado mañana «en la más estricta intimidad» en el cementerio de San Isidro, en Madrid, según han indicado fuentes del grupo funerario Interfuneraria encargado del velatorio. De acuerdo con estas fuentes, la salida del féretro desde el tanatorio de San Isidro, en el que está abierto el velatorio desde las 17.00 horas de hoy, está prevista para las 13.00 horas. Hasta la sala del tanatorio, cuyo cierre está previsto para las 21.00 horas de hoy, se han acercado políticos, empresarios y numerosos personajes de la crónica social, según recoge EFE.

Isabel Preysler, viuda de Miguel Boyer, ha dado las gracias a los numerosos periodistas que hacían guardia ante el tanatorio San Isidro donde se encuentra su marido, poco antes de subir a un coche para marcharse del lugar. Isabel Preysler, acompañada por sus hijas Támara Falcó y Ana Boyer, vestida de negro y con gafas oscuras, ha agradecido, a través de un cristal, la presencia de los medios que han permanecido durante toda la tarde a las puertas del tanatorio. La viuda de Boyer, que ha recibido el pésame de políticos, empresarios y numerosos personajes conocidos de la crónica social, abandonó el tanatorio poco después de las 9:30 de la noche, media hora después de que terminara el horario para las visitas.

Miguel Boyer Salvador nació el 5 de febrero de 1939 en San Juan de Luz (Francia) en el seno de una familia catalana exiliada, dos meses antes del fin de la Guerra Civil. Licenciado en Ciencias Físicas y Ciencias Económicas con premio extraordinario por la Universidad Complutense de Madrid, fue militante socialista desde los años sesenta, lo que le costó varios meses de cárcel en Carabanchel y la expulsión de la Junta de Energía Nuclear, donde trabajaba como físico. Entró a formar parte de la Ejecutiva socialista en 1976 y resultó elegido diputado por Jaén en las elecciones de marzo de 1979, si bien un año y medio más tarde renunció por motivos profesionales. Antes de eso ya había sido economista del servicio de estudios del Banco de España, director de Estudios del Instituto Nacional de Industria (INI) y director de Planificación de Unión de Explosivos Riotinto.

Ministro con Felipe González

Le duró poco a Boyer el descanso de la política porque en diciembre de 1982 entró a formar parte del primer gabinete de Felipe González, años en los que se ganó la fama de frío y altivo, y en los que llegó a estar considerado el ministro más poderoso de aquel Gobierno. Conocido como «el superministro» en los años en que fue titular de Economía, Hacienda y Comercio, Miguel Boyer será recordado fundamentalmente por haber llevado a cabo la expropiación de Rumasa. Para la historia quedan las imágenes de José María Ruiz-Mateos, atacando al grito de «¡qué te pego leche!» a Boyer, a quien persiguió sin descanso disfrazado de Supermán o de presidiario, entre otras cosas, recuerda Efe.

Choque con Alfonso Guerra

De su etapa en el Gobierno socialista queda una estricta política monetaria dirigida a controlar la inflación, así como el choque ideológico con el otro «peso pesado» del gabinete, el vicepresidente Alfonso Guerra. Es probable que en aquellos años comenzara su transición política, que tuvo como punto de inflexión su inesperada dimisión del Gobierno en julio de 1985 y acabó cuando dejó las filas socialistas en 1996 para apoyar públicamente el programa económico de quienes hasta entonces habían sido sus adversarios políticos. En el 2002 sería nombrado miembro del patronato de la FAES, la fundación del PP, a propuesta del expresidente del Gobierno José María Aznar, aunque la abandonó en el 2011 en otro giro por el que volvió a acercarse al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

Matrimonio con Isabel Preysler

Los contrastes también alcanzaron a su vida privada, en la que pasó de la discreción de su matrimonio con la ginecóloga Elena Arnedo, con quien tuvo dos hijos, a su enlace con la reina del «papel cuché» Isabel Preysler, con quien ha estado casado más de 26 años y tuvo una hija. La pareja Boyer- Preysler formó parte de la denominada «beautiful people», gentes del mundo financiero y empresarial que prosperaron en los años 80 y 90 durante los gobiernos socialistas, como el exgobernador del Banco de España Mariano Rubio, o el expresidente de Banesto Mario Conde. Por su pertenencia a aquel círculo se vio salpicado por el caso Ibercorp, escándalo financiero que supuso la caída en desgracia de Mariano Rubio, pero del que Boyer salió indemne.

Medidas liberales

Sus políticas de ajuste y reformas se encontraron con la oposición del aparato guerrista y de los sindicatos, defensores de una política económica más expansiva frente a las que consideraban medidas liberales de Boyer. Fueron los años de la reconversión industrial, que generó una elevada destrucción de empleo, y de la expropiación por decreto de uno de los mayores grupos privados del país para proteger al erario público (unos de sus principales acreedores), a sus trabajadores y a los accionistas.

La salida de Boyer del Gobierno a petición propia se justificó en el cansancio, pero inevitablemente fue interpretada como la victoria de Alfonso Guerra. Tras su periodo en el Ejecutivo pasó por el Banco Exterior, Cartera Central, Grucycsa y FCC, hasta que fue nombrado presidente de CLH, cargó que ocupó hasta el 2005.

En los años posteriores fue designado consejero de Reyal Urbis y de Red Eléctrica de España, consejos en los que causó baja después de sufrir un derrame cerebral en la primavera del 2012.