Penas de cárcel para armadores y patrones por el naufragio del «Ficha»

xosé Carreira LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

El fiscal cree que graves irregularidades provocaron la muerte de un marinero

18 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Los dos patrones (el de costa y el de pesca) y el armador del arrastrero ribeirense Ficha Segundo, que se hundió el 15 de febrero de 2010 a 23 millas al norte de Burela, han sido condenados a ocho meses de cárcel por el naufragio en el que perdió la vida el marinero Francisco José García Pouso, de 45 años. La misma pena le ha sido aplicada al armador y patrón de pesca del Marpar Segundo, que trabajaba a la pareja con el Ficha y se encontraba a 50 metros de donde ocurrió el hundimiento. Fue, de hecho, el barco que salvó a 7 de los 8 tripulantes del barco naufragado.

La condena es consecuencia de una serie de «decisiones erróneas» que, según el fiscal, motivaron el hundimiento del pesquero. Inicialmente la acusación pública pedía para los acusados tres años de cárcel, sin embargo ayer, antes de iniciarse el juicio en Lugo, se produjo un acuerdo entre las partes. El acusador público dejó la condena en los 8 meses que aceptaron los imputados porque fue reparado el daño causado, al haber sido indemnizados la viuda y los hijos menores del marinero fallecido.

Los cuatro condenados podrán sustituir la pena de prisión por el pago de 2.880 euros de multa cada uno de ellos. Además, no podrán ejercer su oficio durante 9 meses.

Los hechos son constitutivos de un delito contra los derechos de los trabajadores, en concurso con un delito de homicidio por imprudencia grave.

En el momento del naufragio, había olas de entre 3 y 4 metros, lo que provocaba fuertes balanceos del barco. En un momento dado, se desplazó la carga de la bodega, escoró el buque y comenzó a entrar agua por la puerta de salabardeo. La zona tenía una puerta estanca, cuyo cierre hubiese impedido la zozobra, pero no pudo hacerse porque la atrancaba la canaleta del pescado. Debería haber sido retirada, pero no dio tiempo y el agua anegó el arrastrero. Por eso el fiscal sostiene que que los patrones erraron al elegir el sistema para subir el pescado a bordo -salabardear, en lugar de izarlo por popa-, con lo que la estabilidad del barco no se hubiese visto comprometida.

Cadena de mando

También detecta fallos en la cadena de mando, pues la decisión de salabardear la tomó el patrón de pesca cuando correspondía al patrón de costa, aparte de que la titulación de aquel -patrón de segunda clase de pesca litoral-, no era la que se requiere para mandar en un buque como el Ficha, de 129 toneladas.

El fiscal también hace ver que la tripulación no estaba preparada para hacer frente a la emergencia y no emplearon los chalecos salvavidas y nadie tenía clara la cadena de mando. De hecho, aún hoy no se sabe quién dio la orden de abandonar el barco, simplemente «se corrió la voz».

Y en medio de ese caos, «ninguno de los patrones de los dos barcos activó la alerta de socorro», con lo que el salvamento se demoró entre 20 y 30 minutos. Es más, si no llega a estar el Marpar Segundo al lado, el resultado sería «aún más trágico».

El armador del Ficha admitió ayer que habían aceptado la condena: «Non nos gusta, pero é o que marcan as autoridades xudiciais».