Las ventas crecieron un 16 % hasta agosto y encadenan 12 meses al alza
02 sep 2014 . Actualizado a las 10:33 h.El mercado del automóvil, que es uno de los indicadores de consumo más fiables, confirma que Galicia está en remontada.
Entre enero y agosto, los concesionarios gallegos vendieron 22.435 coches nuevos. Se trata de operaciones favorecidas por las ayudas de entre 2.000 y 3.000 euros (en el caso de familias numerosas) concedidas por el Gobierno y los fabricantes para animar el mercado, y que están cumpliendo plenamente su objetivo: en lo que va de año, en Galicia se han vendido 3.800 vehículos más que en el 2013, es decir, un 16,6 % más.
Todas estas operaciones han dejado en los concesionarios gallegos una facturación superior a los 500 millones de euros, una cifra que Faconauto elabora a partir de un gasto medio de 21.000 euros por vehículo.
Las ventas han subido en las cuatro provincias gallegas. Y el saldo es positivo también en agosto, últimos mes computado, con un total de 2.429 operaciones cerradas (un 7,53 % más que en el mismo mes del 2013).
Un mercado fuerte
De este modo, los concesionarios de la comunidad encadenan 12 meses consecutivos de crecimiento en sus ventas, al igual que ocurre en el conjunto de España, en donde las matriculaciones han crecido un 16,4 % en lo que va de año, gracias a los 600.000 vehículos vendidos. Solo en agosto, el mercado nacional creció un 13,7 % (45.355 matriculaciones), según los datos difundidos ayer por las patronales de fabricantes (Anfac) y concesionarios (Faconauto y Ganvam).
Y todo, de nuevos, gracias a los incentivos a la compra. Al menos esa es la opinión generalizada de los agentes implicados. Por ejemplo, David Barrientos, portavoz de Anfac, explica que el Plan PIVE, que va ya por su sexta edición ha permitido que se hayan matriculado 80.000 turismos más que a estas alturas del año pasado. «El mercado ha crecido de nuevo en agosto y acumula ya un año de manera ininterrumpido haciéndolo, lo que nos da una idea de la fortaleza del PIVE y el tremendo efecto», afirmó.
En la misma línea se expresa Jaume Roura, presidente de Faconauto: «Agosto era importante para comprobar la madurez de la recuperación del mercado y, aunque es el mes estacionalmente más bajo del año, el efecto positivo del Plan PIVE sobre los compradores ha seguido».
Anfac explicó ayer que el actual PIVE, en vigor desde el pasado mes de julio, ha consumido ya el 40 % de sus fondos (unos 70 millones del total de 175 millones de fondos públicos habilitados). Con estos resultados de ventas, el sector da por hecho que el presupuesto se agotará antes de final de año.
Que siga el PIVE
«El PIVE 6, en contra de las previsiones iniciales, no aguantará hasta final de año, como estaba previsto. Con más de 35.000 reservas ya validadas y a un ritmo de más de 1.000 al día, será difícil que dure más allá de octubre o noviembre, a lo sumo», ha advertido augura Juan Antonio Sánchez Torres, presidente de Ganvam.
«Lo idóneo sería que para evitar un parón en el mercado, se aprobara con cierto anticipo la siguiente edición», sugería ayer. «Solo así se conseguirá cerrar el año en el entorno de los 875.000 coches matriculaciones, un 21 % más que en el 2013 y el mejor dato desde el 2010», aseguró el portavoz de los concesionarios.
Y puede que efectivamente haya un PIVE 7. Pero, ¿qué pasará cuando no haya más ediciones? ¿Cómo reaccionará el mercado sin ayudas? «Nuestra mayor preocupación es que este afianzamiento de las matriculaciones se mantenga en el tiempo», aseguró Jaume Roura, aunque ni concesionarios ni fabricantes se atreven a hablar de un mercado sin PIVE.