Banesco amortiza en 6 meses su primer pago por Abanca

Rubén Santamarta Vicente
Rubén Santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Banesco cambió la denominación de Novagalicia por Abanca el pasado junio.
Banesco cambió la denominación de Novagalicia por Abanca el pasado junio. sandra alonso< / span>

El grupo venezolano abonó 403 millones en mayo por la entidad gallega, que cierra el semestre ganando 314, una cifra récord

30 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Al grupo venezolano Banesco la compra de la mayor entidad financiera de Galicia le está saliendo ya a cuenta. Ganador contra pronóstico en la subasta que hizo a finales de diciembre el FROB, ofreció por la entidad 1.003 millones de euros a pagar en varios plazos hasta el 2018. El primero, el de mayor cuantía, lo depositó en mayo sin problemas: 403 millones de euros. Ahora, Abanca, que es como se llama la antigua Novagalicia (o NCG, antes Novacaixagalicia y antes Caixa Galicia y Caixanova) está en beneficios récord: 313,9 millones de enero a junio, tras impuestos. Es decir, ya le ha compensado prácticamente ese primer pago.

Estas ganancias, en todo caso, eran impensables hace un tiempo. Suponen volver a los grandes beneficios que tenían las antiguas cajas. Sus números están incluso en la línea de algunos grandes grupos empresariales del Ibex 35. Y superan las mejores previsiones del grupo: en junio, en la presentación de Abanca, el consejero delegado, Francisco Botas, avanzó que el 2014 acabaría con 150 millones de beneficio antes de impuestos. Ahora, antes de tributos esa ganancia supera los 440; casi el triple. Comparada con el 2013, cuando aún mandaba el FROB, la comparación resulta más abultada: entonces se ganaron 47 millones. Su hermano, el Etcheverría, con el que se fusionará en diciembre, ganó en este tiempo 4,2 millones.

¿Cómo se explican estas cuentas, aprobadas el 1 de agosto pero no desveladas hasta ayer? Aquí, algunas de las claves:

El negocio bancario

Mejora en depósitos, reducción de crédito. Abanca cierra el semestre captando 958 millones más en depósitos, frenando el descenso de los últimos años. El crédito, en cambio, ha adelgazado en 334 millones, pese a haber formalizado casi 1.500 millones en nuevas operaciones. El margen de intereses, que mide el negocio puro bancario (prestar y tomar dinero) cae un 21 %, que se compensa por menos provisiones y operaciones extraordinarias como la venta de participadas (Adolfo Domínguez, Gallega de Economía Social...) o cartera de valores. Sin plusvalías extra, el beneficio habría pasado de 440 a 134 millones antes de impuestos.

Contención de gastos

Un 35 % menos en personal. Es otra de las claves importantes: en un año el gasto de la plantilla ha pasado de 208 millones a apenas 135. Por el camino se han quedado 1.400 empleos.

Alta solvencia y mora

Buen capital, mal el crédito constructor. El banco está en una buena posición para afrontar los test de estrés de otoño: tiene una ratio de capital del 12,1 %, cuatro puntos por encima de lo exigido. Hace un año no se llegaba al 5 %, y en ello tiene mucho que ver la conversión de preferentes. Pero también la gestión del riesgo que se está haciendo en el banco. Sin embargo, el lunar sigue siendo la alta morosidad: un 16,9 %, tras caer ligeramente. Es cuatro puntos más que la media del sector. Y lo peor: pese a reducir un 10 % el crédito constructor, lo que queda (360 millones) tiene una mora del 60 %.

Y las preferentes

14.910 devoluciones. A todos esos clientes se les devolvió el dinero a través de acuerdos individuales al finalizar el arbitraje. El FROB le ha blindado ya 250 millones para esta contingencia.