Al menos 17 alertas contra el mejillón desde Francia e Italia

Redacción / La Voz

ECONOMÍA

La conselleira Quintana asegura que nunca se ha podido demostrar que el bivalvo tuviese toxina

28 ago 2014 . Actualizado a las 09:27 h.

«Non é a primeira vez que un país europeo lanza unha alerta sanitaria contra o mexillón galego, pero logo non foron capaces de acreditar que a orixen da intoxicación fora o mexillón galego». Fue casi lo primero que quiso dejar bien claro la conselleira do Mar, Rosa Quintana, cuando compareció en rueda de prensa el viernes pasado para dar explicaciones sobre la última alerta emitida por Francia. Quintana incluso habló de que «o máis fácil parece que é botarlle a culpa ao mexillón galego» de casi toda cuanta intoxicación alimentaria por moluscos se produzca en algún país europeo. Pero, para la conselleira, «non hai posibilidade de que o mexillón galego escape dalgún control». Pero ¿qué otras alertas se lanzaron en Europa que mancharon el nombre del bivalvo de las rías gallegas? En la documentación registrada en la hemeroteca de La Voz de Galicia figuran al menos estas 17.

Doce alertas italianas en el 2006

Entre enero y febrero del 2006, Italia notificó a la UE doce casos de alertas sanitarias por otros tantos lotes de mejillón gallego contaminado con toxina paralizante. El caso lo destapó aquí el ex conselleiro de Pesca Enrique López Veiga (PP), quien acusó entonces a su sucesora, la socialista Carmen Gallego, de relajar los controles sobre el bivalvo. Gallego reprobó estas críticas y aseguró que todo el mejillón gallego que salía al mercado lo hacía en perfectas condiciones. El sector vio detrás un intento de desprestigiar el producto.

Otra francesa en el 2010

A mediados de septiembre de ese año, Francia retiró del mercado y luego destruyó una partida de mejillón gallego sospechoso de contener toxina diarreica. Así se lo notificó al sistema de alertas rápidas de la Dirección General de Sanidad y Consumo de la Comisión Europea. Rosa Quintana ya estaba al frente de la conselleira y entonces aseguró que el polígono de bateas del que había salido el bivalvo estaba abierto (libre pues de toxina) cuando se exportó a Francia. Por lo tanto, subrayó que el mejillón bajo sospecha no estaba afectado por la marea roja. Pero Bruselas hizo extensiva la alerta contra el molusco gallego a otros ocho países. Les advertía de que el bivalvo que habían adquirido podía contener toxina.

Una más de Francia en el 2013

El 12 de abril del año pasado, las autoridades francesas volvieron a la carga contra el mejillón galaico, al que responsabilizó de provocar varios casos de gastroenteritis en el entorno de la ciudad de Marsella. Incluso cerró sus fronteras al bivalvo. El día 29 de ese mes decidió volver a abrirlas, pero no retiró la alerta ni explicó entonces las pruebas de cargo que tenía contra el molusco. Nunca llegó a hacerlo, pero la sombra de la duda quedó ahí.

Y otras tres de Italia en el 2013

En octubre pasado y en menos de una semana, las autoridades italianas lanzaron tres alertas sanitarias contra el mejillón gallego tras detectar partidas con toxina diarreica. Estas no llegaron a ser distribuidas en el mercado, sino que fueron interceptadas antes, en las depuradoras que tenían que tratar los bivalvos. El secretario xeral do Mar, Juan Maneiro, aclaró entonces que el sistema de control había funcionado perfectamente.