La conselleira de Facenda, Elena Muñoz, avanzó ayer en el Parlamento que la sanción media impuesta a los emigrantes retornados que no declararon su pensión en el extranjero es de 274 euros. Sin embargo, la portavoz de los afectados de O Morrazo, Maruchi Álvarez, negó el dato para cifrarlo en 600 euros.
Muñoz respondió a una pregunta de la diputada socialista Carmen Gallego sobre las sanciones a este colectivo, en la que indicó que el importe medio reclamado a cada uno es de 603 euros. Muñoz apuntó que estos pensionistas son el 6,5 % del total y que el 67 % de ellos «cumplieron con sus obligaciones».
En paralelo a la sesión parlamentaria, casi un centenar de afectados se concentraron en el exterior del pazo de O Hórreo para corear lemas como «Manos arriba, esto es un atraco».