El banco ha desembolsado casi 10.000 millones desde el 2012 para sanear su balance
02 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Después de cerrar en negativo los años 2011 y 2012, con más de 8.000 millones en pérdidas, Novagalicia Banco (o NCG) completó su tercer ejercicio con una vuelta a la normalidad, a los beneficios. El negocio bancario le reportó 2,4 millones cada día; más de 871 millones durante el 2013. Ahí hay que computar unos 500 que pusieron los preferentistas. Aun así, sin esto y otras plusvalías, los números tampoco serían malos: se llevaría unos 300 millones.
Las cuentas finales, sin embargo, se quedan en una cifra mucho más discreta. Tras saneamientos y provisiones el banco gana 17,9 millones. Son, en todo caso, más de lo previsto en el plan de futuro de NCG -14,8 millones se esperaban-, y la constatación de que la entidad mantiene su política conservadora: sanear. Y siendo el 2013 excepcional en la trayectoria de la entidad, entre salida de personal, cierre de oficinas, venta de red y de Evo, y la subasta final para acabar en Banesco.
Las cuentas revelan, además, algo que se intuía: con lo que gana este banco, el comprador podrá ir pagando hasta el 2018 los plazos que le ha dado el FROB para cerrar la operación. No necesitará Banesco tirar de su propia liquidez. Estas son las claves
El saneamiento
Por lo que pueda pasar en el futuro. Novagalicia no tiene accionistas a los que remunerar y, por lo tanto, tampoco tiene que presentar unos beneficios abultados. Por ello, el grueso del negocio financiero -esos 2,4 millones al día- más las bonificaciones fiscales se han ido a saneamientos del balance. Destinó en el 2013 más de 1.300 millones, que sumados a los más de 8.000 del 2012 para otras limpiezas suponen que el banco ha destinado casi 10.000 millones en dos años para proteger sus cuentas. Porque no se sabe lo que puede pasar en el futuro. Por lo pronto, un 80 % de sus créditos refinanciados están cubiertos. La hucha creada, en todo caso, no es una prevención contra las sentencias judiciales que puedan llegar en las preferentes o en el conflicto con Aviva, por ejemplo. Porque el FROB ya ha blindado a Banesco: le cubrirá el 80% de lo que pierdan.
Las preferentes
La solvencia, gracias a los afectados. A NCG las preferentes y subordinadas le ha supuesto una cruz, por las continuas protestas de sus afectados, exigiendo todo su dinero. Pero también una cara importante: gracias a ellos ha situado su nivel de solvencia en su cifra más alta: un 11,6 % de ratio de capital, con un excedente de 590 millones de euros. Una fortaleza envidiable e impensable hace un año (esa ratio apenas superaba el 5 %). Y conviene apuntar que esa solvencia se logra en buena medida gracias a la quita de casi 500 millones que se le aplicó a los preferentistas.
La morosidad
Sigue siendo una cruz. El fuerte saneamiento tiene su explicación en este dato: hay más de 5.000 millones de morosos en el balance del banco. Es casi el 18?% del crédito. Dos puntos por encima de la media del sector. Y pese a que el grueso de su crédito promotor e inmobiliario ha acabado en manos de la Sareb, el banco malo.
La reestructuración
Menos crédito, menos oficinas, menos plantilla. Novagalicia es hoy un banco más pequeño; cuando se fusionaron las dos cajas la entidad sumaba unos activos de 70.000 millones; hoy son 18.000 millones menos. Por el medio se han cerrado más de 180 oficinas, vendido otras 66, se ha recortado plantilla -1.400 empleados menos en el último año- y se ha adelgazado el balance. Ninguna otra entidad ha realizado semejante reestructuración. Ha ejecutado una notable reducción de crédito, sobre todo a grandes empresas. Sumado ello a que los depósitos de particulares caen menos, se logra equilibrar el balance, algo que no sucedía en los últimos años: quiere decir que hay tanto dinero prestado como en cuentas particulares. En los años del ladrillazo, había más crédito que depósito.
Los directivos
Recorte de salario. El banco también reveló las retribuciones de consejeros y altos directivos. Estos últimos percibieron un 10 % menos; 214.000 euros de media cada uno. El presidente y el consejero delegado tienen su sueldo congelado en 300.000 euros, y no perciben dietas.