Francisco Botas: «Vamos a lograr que el crédito llegue al fin a familias y pymes»

Rubén Santamarta Vicente
Rubén Santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

CESAR QUIAN

Su nombramiento oficializa el desembarco de Banesco en Novagalicia

25 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Pactado su nombramiento con el FROB, asume desde esta semana Francisco Botas (Ferrol, 1967) la responsabilidad de ser el hombre fuerte de la primera entidad financiera del noroeste español. Un reto mayúsculo para el que lleva meses preparándose este directivo del Banco Etcheverría. Fue la persona que desde España logró que el grupo venezolano Banesco se llevara NCG en una subasta pública, contra todo pronóstico. Esta es un recompensa. En unos meses pasará de director general a consejero delegado del nuevo banco, tras la unión con el Etcheverría y la conformación del nuevo consejo. Será el referente, como lo fue en su día José María Castellano, cuyo trabajo aplaude sin ambages: «Es un excelente gestor».

-Pega un salto increíble, del Etcheverría a Novagalicia. ¿Con qué expectativas?

-Lo primero, acelerar el proyecto de integración y un cambio profundo en el organigrama que se verá en las próximas semanas. El objetivo básico es que la entidad esté centrada en Galicia, en su territorio, sus familias, sus pymes, que sea más ágil. Un banco de sentido común.

-Banca aburrida, vamos...

-De sentido común, lo que nosotros [refiriéndose al Etcheverría] conocemos muy bien.

-¿Por qué llega ahora su nombramiento, y no antes, o después, cuando ya se cierre el proceso de integración de Novagalicia en el grupo Banesco?

-Porque queremos agilizar todo esto, trabajar con rapidez para nuestros equipos y para nuestros clientes, que se note desde ya. Queremos centrarnos en ese gran objetivo: lograr que al fin fluya el crédito para familias y pymes. Y que la gente sienta que este banco es cercano. Se hace ahora para que pronto se empiecen a notar los resultados.

-Tras la salida de varios directivos de Novagalicia en las últimas semanas, el banco descabezado. ¿Usted viene a ser el referente para plantilla y clientes?

-No necesariamente. Estoy dentro de un gran proyecto y de una gran organización. Con este paso se inicia un proyecto libre, de banca cercana al cliente, tradicional, e, insisto, pegada a Galicia.

-Le facilitará la tarea que usted Novagalicia lo conoce bien, sus directivos, sus números...

-Sí, lo facilita mucho, hay un gran conocimiento mutuo y una profesionalidad óptima.

-¿Y se quedará en su equipo alguno de los actuales altos ejecutivos de Novagalicia? Ya se han ido varios directores generales, el consejero delegado...

-El nuevo equipo se verá pronto, en dos semanas [otras fuentes apuntan a que será antes, esta misma semana]. Primará el talento, eso seguro, la competencia profesional, y se hará una organización contando con todos, sin descartar que llegue gente de fuera. A la plantilla le digo que se inicia una etapa de mucha ilusión, un proyecto que les motivará, y en el que acompañaremos a nuestros clientes.

-¿Tiene alguna idea de cómo se llamará el nuevo banco?

-Estamos trabajando en ello con intensidad, y esperamos tenerlo listo en el segundo trimestre. Pero antes hay que concretarlo, cerrarlo bien con consultoras especializadas... El nombre será un reflejo claro de lo que queremos que sea el banco.

-¿Le apena que se pierda el nombre del Etcheverría, usted que viene de esa casa?

-Eso no está decidido aún. El Etcheverría ha sido clave en todo este proceso, y siempre estará ahí por su saber a la hora de hacer banca, que no se va a perder. Y en lo del nombre, todo está abierto.

-¿Y cómo va la negociación con Bruselas para que se levanten algunos vetos a Novagalicia?

-Muy bien, aunque no es el momento de que tomen una decisión. Estamos aproximándonos de forma muy positiva.