El Tesoro volvió a salir airoso ayer de su examen ante los inversores. Adjudicó 5.005,7 millones de euros en bonos a 3 y 5 años y obligaciones a 15, con un rendimiento que volvió a marcar niveles mínimos. El resultado de la emisión se situó en la parte alta de la banda objetivo (fijado en una horquilla de entre 4.000 y 5.000 millones de euros) y el nivel de demanda fue de 2,3 veces la oferta.
En bonos a 3 años, los inversores solicitaron títulos por 4.152,1 millones de euros y se adjudicaron 1.002,1 millones a un tipo marginal del 1,352 %, levemente por encima del 1,339 % de la subasta del 6 de marzo último. En bonos a 5 años se colocaron 2.670,5 millones (4.920,5 millones solicitados), al 2,004 %, inferior al 2,294 % de la referencia comparable, subastada el 20 de febrero. El marginal de ayer volvió a marcar el valor mínimo de toda la serie histórica.
Niveles precrisis
En las obligaciones a 15 años, los inversores demandaron títulos por 2.520,2 millones de euros y se adjudicaron 1.333,1 millones a un tipo marginal del 3,869 %, por debajo del 4,223 % de la subasta del 16 de enero último. Es es tipo más bajo pagado por el Tesoro a ese plazo desde febrero del 2005, mucho antes de que la crisis nos estallara en las manos.
A buen ritmo
Cuando apenas han transcurrido tres meses desde que comenzó el año, el Tesoro ha captado ya en los mercados 44.493 millones de euros dentro del programa de financiación regular a medio y largo plazo. Esta cifra supone un 33,4 % de la previsión de emisión incluida en la Estrategia del Tesoro para el 2014 (133.300 millones de euros). El coste medio de emisión a 28 de febrero pasado era del 2,31 %, por debajo del 2,45 % de cierre del pasado año.