El PP veta el acuerdo para renegociar en Madrid las cuotas de la flota cerquera
ECONOMÍA
Cinco armadores permanecieron encerrados hasta la noche en el Parlamento para forzar el pacto entre todos los grupos
12 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Los relojes marcaban las 13 horas, cuando cinco armadores de la flota de cerco, pertenecientes a los puertos de A Coruña. Sada, Malpica, Portosín y Cambados, accedieron ayer al Parlamento invitados por el BNG para hacerle llegar sus demandas a los grupos políticos. Y sus exigencias fueron escuchadas por todos. «Temos fame, queremos saír ao mar, pero estas cotas non son suficientes», explicaba José Blanco Agraso, de Portosín, con la esperanza de que la reivindicación tomara forma de acuerdo parlamentario para forzar una renegociación del reparto de cupos en Madrid. Pero no lo lograron, en gran medida por la reticencia mostrada por el PP a dejarse condicionar por las «medidas de presión», dijo el portavoz popular, Pedro Puy, en alusión a la contundente protesta que se hizo en paralelo en la calle.
Los armadores decidieron permanecer encerrados en una sala de comisiones de la Cámara autonómica, por la que empezaron a desfilar diputados de todos los colores y personal del gabinete de la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, y de la conselleira de Mar, Rosa Quintana. Esta última se ofreció a reunirse con los armadores, envite que ellos rechazaron por entender que lo último que hizo la responsable autonómica con el sector del cerco fue «insultarnos».
Y dentro del encierro también se vivieron momentos de tensión, sobre todo cuando los armadores fueron informados, pasadas las 15.30 horas, que las fuerzas del seguridad acababan de cargar contra los marineros del cerco para restablecer el orden.
Ese ambiente tenso marcó la reanudación del pleno parlamentario, a las cuatro de la tarde, hasta el punto de que el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, solicitó formalmente la suspensión de la sesión para celebrar una Xunta de Portavoces al objeto de analizar la situación creada en la calle. La petición fue secundada por AGE, pero al posponer el PP la reunión al término del pleno, los diputados de los dos grupos minoritarios optaron por abandonar el hemiciclo y reunirse con los manifestantes en la calle.
Los socialistas, en cambio, permanecieron dentro, pero dejaron decaer todas sus iniciativas, acortando notablemente la sesión. En paralelo, el PSdeG impulsó una resolución de dos puntos, secundada por el resto de la oposición, con la confianza de que pudiera servirle también al PP. Pedían básicamente rechazar el actual reparto de la cuota de jurel y caballa, emplazando a Madrid a negociar un nueva redistribución de capturas menos dañina con Galicia.
Pero el PP se cerró en banda y no la secundó. Con todo, los armadores accedieron a abandonar el encierro hacia las nueve de la noche, tras obtener el compromiso de que hoy se seguirá negociando una postura común para sus reivindicaciones.
Los armadores que estuvieron encerrados ayer durante nueve horas en el Parlamento depusieron finalmente su actitud y abandonaron la casona de O Hórreo tras obtener el compromiso de que hoy podrán volver para reanudar los contactos con los grupos políticos al objeto de lograr un acuerdo satisfactorio para todos, que para ellos pasa por la renegociación de las cuotas de pesca.