Escotet reclama al Estado que contribuya a la solución de las preferentes
25 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El desembarco de Banesco en NCG culminará, si no hay sobresaltos, en el mes de mayo. Ese es el calendario que avanzó ayer en A Coruña el director general del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Antonio Carrascosa, que apuntó que tan solo resta que el Banco de España y la Comisión Europea bendigan la venta.
Pero esa no es la mayor preocupación de los nuevos dueños de la entidad, que, según reveló Carrascosa, ya están negociando en Bruselas para que las autoridades comunitarias abran la mano con el plan de reestructuración de la entidad. Revisión que, a su juicio, no debería pasar por mantener un mayor número de oficinas, porque afectaría a la eficiencia de la entidad, sino por relajar las restricciones impuestas a la entidad para operar en ciertas actividades como la banca corporativa: «Hay grandes empresas en Galicia que no tiene sentido que no puedan ser financiadas por NCG», resaltó, al tiempo que abogó también por permitir al banco que se adentre en «actividades inmobiliarias razonables».
El representante del FROB esquivó en su llegada a la Fundación Novacaixagalicia la protesta de más de un centenar de preferentistas, aunque no se libró de sus reproches, ya que uno de los afectados, que asistió como público a la conferencia que pronunció, le afeó la nula disposición del organismo que dirige a buscar una solución. Carrascosa cargó esa responsabilidad en la espalda del nuevo propietario de NCG, Juan Carlos Escotet, también presente. Si este asume íntegro el coste de resarcir a los preferentistas, aquí paz y después gloria. Si quiere que el FROB -que en las condiciones de venta de la entidad aceptó asumir un 85 % de futuras condenas- asuma parte del desembolso, tendrán que sentarse a negociar, también con Bruselas: «Si supusiese pasar de una garantía a una subvención tendría que pronunciarse también la UE, porque el FROB estaría dando una ayuda a una entidad privada» que, dice, Bruselas podría considerar ayuda de Estado.
Escotet espera colaboración
Cuando surgió el tema de las preferentes, Escotet abandonó el auditorio para reunirse con un grupo de afectados, a los que les reiteró su voluntad de ofrecer una solución. No solo eso, sino que, antes de que terminara la conferencia, aseguró ante el público que ya se ha remitido una propuesta al FROB, al contrario de lo que había asegurado previamente Carrascosa. Y le mandó otro recado: aseguró que está dispuesto a asumir su parte en la solución, pero espera que haya esa misma responsabilidad por parte del Estado para desbloquear la solución.
Carrascosa, que se mostró esquivo en temas de calado y evitó valorar la colaboración que Javier García de Paredes ha prestado para que el FROB pueda recuperar 430 millones de euros en su litigio con la aseguradora Aviva, fue rotundo a la hora de descartar la posibilidad de que el organismo pueda llegar a un acuerdo extrajudicial con los empresarios que han acudido a los tribunales para recuperar los 70 millones de euros que invirtieron en la entidad y que luego vieron reducidos a cero.
Argumentó que el proceso se se ajustó a la ley y que no sería de recibo compensar estas pérdidas y no la de fondos públicos.
Sobre la depuración de responsabilidades por la gestión pasada, Carrascosa se limitó a asegurar que están revisando operaciones dudosas vinculadas al sector inmobiliario.