Menos pesca gallega

espe abuín REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Las lonjas cerraron el año con caídas tanto en producción como en facturación

26 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Regreso al 2005. Si por las lonjas gallegas fuese, todavía estaría el bipartito instalado en la Xunta y no habría muerto el papa Juan Pablo II. Y es que hay que remontarse ocho años en el pasado para encontrar un resultado parecido al que arrojó el 2013 en la producción pesquera gallega. Los recintos de subastas de la comunidad cerraron el ejercicio vendiendo 163,6 toneladas de productos marinos frescos y facturando por ellos 412,7 millones. Es casi un 7 % menos (6,96 %) con respecto al 2012 en el caso de los kilos, y un 6,73 % por debajo en el de los euros. Un equilibrio que evidencia que en el 2013 Galicia no supo vender mejor sus capturas: la caída en el volumen subastado es casi equivalente a la de los ingresos obtenidos, lo que indica que se vendió casi al mismo precio lo que pasó por las lonjas.

Peor es la comparativa con los años de mayor producción. El 2013 sería el más malo del decenio de no ser por los pésimos resultados del 2003 y el 2004 (los dos primeros de la era pos-Prestige) y sus cifras están un 16 % por debajo del récord de volumen subastado, en el 2009. Eso, en kilos. En euros, dista un 13 % de la mejor facturación del decenio -el 2011 y sus 474,8 millones- y de nuevo solo lo empeoran en descalabro los más inmediatos al último desastre ecológico que asoló la costa gallega.

El ránking

En cuanto a las plazas, muy pocas son las que no han visto pasar menos producto por las rulas. Tampoco entrar más euros. Ni siquiera las más potentes, Vigo y A Coruña, se han salvado del retroceso. En el ránking apenas hay variaciones. La viguesa sigue a la cabeza por cifra de negocio y se mantiene como única de Galicia que supera los cien millones de euros de facturación, aunque lo hace por la mínima. Y el único movimiento que se ha detectado en el ránking es que la rula de Cambados se cae de entre las diez primeras para dar paso a la de Carril, que adelanta a O Grove.

Si el rasero por el que se mide es la cantidad de kilos, A Coruña aparece a la cabeza de Galicia, seguida de la de Vigo. En los ocho peldaños siguientes, los mismos nombres. Solo varía que Camariñas y Portonovo se intercambian posiciones a favor de la de la Costa da Morte que relega a la pontevedresa a la décima posición.

Dejando al margen las lonjas que dependen de Puertos del Estado -Vigo, A Coruña y Marín-, la primera rula por cifra de negocio es Burela, que no ha podido esquivar el escenario de caídas generalizadas. No es un descalabro, a juicio del gerente de Armadores de Burela (ABSA), Miguel Neira, pero sí un retroceso significativo. Neira atribuye la bajada de descargas y de volumen de negocio no a una pérdida de mercado de la lonja de Burela -«ao revés, se están concentrando as ventas da flota con base en outros portos»- ni a falta de recurso, sino al descenso de las descargas de xarda, que fueron «bastante inferiores que en anos anteriores» y por «o mal comportamento do polbo». A eso se suma el amarre al que se vieron abocados 30 merluceros por falta de cuota.