Las cifras de inversión en Cataluña recogidas en los Presupuestos auguran un incremento de la tensión entre el Gobierno y la Generalitat. Lejos de mejorar, como reclamaban desde Cataluña, el volumen de inversiones del Estado disminuye de manera drástica. De los 1.267 millones que le correspondieron en el 2013 pasa a recibir 944, lo que implica un descenso del 25,5 % en un año, situándose así como la tercera más castigada. En términos porcentuales, Cataluña recibe un 9,6 % del total del Estado, muy por debajo del 13,8 % que le corresponde a Galicia. Y todavía más desfavorable para Cataluña es la estadística de inversión per cápita. Mientras que a cada catalán le corresponderían 126,5 euros de inversión, a cada gallego se le asignan 490,2, prácticamente el cuádruple. Tampoco Madrid sale bien parada en la comparación, ya que en términos per cápita se le asignan 141,8 euros por habitante.
El ministro de Hacienda no aclaró cuáles han sido los criterios a la hora de asignar las inversiones, pero, en previsión de las protestas desde la Generalitat, señaló que Cataluña, al igual que otras comunidades, también está recibiendo «apoyo financiero» del Gobierno a través de los fondos de liquidez, gracias a lo cual se «garantiza la prestación de los servicios públicos» y el pago de los gastos «más perentorios». Montoro expresó su esperanza de que pronto Cataluña no necesite recurrir más a este procedimiento extraordinario.