Los preferentistas de Novagalicia Banco pierden casi 520 millones con las dos quitas

Los clientes con participaciones preferentes y deuda subordinada de Caixa Galicia y Caixanova (hoy NCG Banco) ya saben a ciencia cierta a qué se enfrentan. De inmediato sufrirán las tan temidas quitas en sus ahorros, y el resto del dinero que les quede se convertirá en acciones de la entidad. El FROB, el fondo de reestructuración bancario, desveló ayer la pérdida exacta que tendrán que asumir cada uno, y que oscila entre el 58 y el 10 % en un primer momento. Porcentajes que se elevan a entre el 65 y el 22,4 % con la segunda quita. Ambas, obligatorias si los usuarios quieren recuperar al menos parte de su dinero. Sobre los 39.000 clientes a los que afecta todo esto, casi 28.000 están en el segundo caso, el del 22 %, los que sufrirán una menor quita.

Tras aplicar esos descuentos, los afectados perderán, con las dos quitas, 517 millones de euros (359 en la primera quita, otros 158 con la segunda). Los más afectados son 3.600 clientes de Caixa Galicia que compraron preferentes perpetuas en diciembre del 2003, seguida de otros de Caixanova que hicieron lo propio en mayo del 2005. Para ambos el recorte supera el 60 %. Los menos dañados son los que tengan subordinadas con vencimiento, a los que, además, se les da la opción de canjear su producto por acciones o por un depósito. Para estos, una mayoría (esos 28.000 sobre 39.000), la recuperación media será del 71 % del nominal.

¿Por qué una primera quita?

Por orden de Bruselas, que obliga a que los clientes de una entidad rescatada, como es NCG Banco, con productos de capital (como preferentes y subordinadas) asuman parte de la factura con su dinero. Así ha sucedido en otros países europeos. Pero solo en España estos productos tóxicos se colocaron de forma masiva entre los clientes.

¿Dónde va el dinero perdido?

Sirve para que la entidad se sanee y no tenga que recurrir a más fondos de la UE (Novagalicia ha recibido 5.425 millones del rescate) y alcance gracias a ello un nivel de solvencia por encima de lo exigido. Sin la quita y canje de las preferentes, la entidad gallega tiene una ratio de capital por debajo del 5 %, cuando lo obligatorio es superar el 9 %. Gracias a estos clientes, se colocará en un cómodo 11,7%. Los clientes aportarán al banco esos primeros 359 millones, y el resto del dinero que se quedarían (1.147) porque se convierten en accionistas. Controlarán entre el 30 y el 35 % del banco, y el resto seguirá en manos del FROB. Para poder dar entrada a esos nuevos accionistas particulares (entre ellos, unos 2.000, el banco hará una ampliación de capital de 1.480 millones de euros.

¿Por qué esa segunda quita a los clientes?

Como consecuencia de lo anterior, los clientes se convierten en accionistas de un banco que no cotiza y, por lo tanto, no pueden vender sus acciones. Aquí entra en juego el Fondo de Garantía de Depósitos, que es la hucha común de la banca. Este órgano recomprará, el 19 de julio, esos títulos, y con un nuevo descuento obligatorio. Es decir, la segunda quita. La razón es que el Fondo de Garantía se quiere blindar del posible riesgo que le da comprar acciones de una entidad que no cotiza en bolsa. Ese recorte es de un 13,8 % sobre la cantidad, en acciones, que ya tuviera el banco. Ahí los afectados perderán esos 158 millones más.

¿Qué tiene que hacer el cliente a partir de hoy?

Lo mejor que pueden hacer los afectados a partir de hoy es acudir a una oficina de Novagalicia para conocer su caso en concreto, y las alternativas que tiene sobre la mesa. La quita la notarán los afectados con un movimiento específico en su cartilla.

¿Qué opciones tienen los afectados?

Para una mayoría, la única solución será coger las acciones y venderlas al Fondo de Garantía en julio. Pero para ello, atención, tendrá que solicitarlo previamente al banco: del 17 de junio al 12 de julio. Si no lo hace, será accionista de NCG sine die. Hay otro caso: los que tengan subordinadas con vencimiento, se les dará la opción de ser accionista (con la segunda quita del 13,8 %) o recibir un depósito remunerado al 2 %, que vence cuando vencería la subordinada. En este caso se expondrá también a una segunda quita, que es variable. Este cliente tendrá que comunicar qué opción prefiere, entre el 17 y el 28 de junio.

¿Siguen abiertos el arbitraje y la vía judicial tras la quita y canje?

Sí. Estas dos alternativas no se interrumpen para que el cliente trate de recuperar el 100 % de su dinero. La quita y canje es obligatorio para todos, aunque el usuario esté apuntado al arbitraje o haya presentado una demanda judicial. Eso cambia. Otra cosa es cuándo se podrá resolver su caso en concreto, en un órgano o en otro. La vía judicial no tiene fecha de caducidad. El arbitraje se acabará posiblemente en agosto.

¿Obliga a devolver los intereses cobrados?

No. Durante estos años, el banco ha pagado algo más de 400 millones de euros a los preferentistas, y ese dinero no se toca; sigue en la cartilla de los clientes.

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