Advierte de que en algunos casos la demora llega a los tres años
30 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La Comisión Europea propuso ayer reducir las trabas burocráticas y administrativas que contempla la legislación de los Estados miembros en materia de acuicultura para rebajar así los plazos en los que se entregan las licencias para nuevas instalaciones, y que, según los cálculos de la comisaria de Pesca y Asuntos Marítimos, Maria Damanaki, pueden llegar hasta los tres años.
Damanaki presentó en Bruselas las directrices sobre el sector acuícola que quiere incluir en la reforma de la política pesquera común, actualmente en debate, y que pretende consensuar con los Gobiernos de los socios europeos y también con los representantes del sector. «Hoy en día, obtener una licencia para una nueva piscifactoría puede llevar hasta tres años, lo que obviamente disuade a los inversores», dijo la comisaria. «Quiero trabajar con los Estados miembros para reducir la burocracia y para apoyar la competitividad del sector, aprovechando el alto nivel de protección del medio ambiente y del consumidor que ya tenemos», añadió.
La comisaria advirtió de que la acuicultura europea «no está creciendo tan rápido» como lo hace «la brecha» entre el consumo europeo de pescado y la producción. «Al contrario, se está estancando», señaló. Según los datos que presentó ayer, los alimentos procedentes de la acuicultura apenas representan el 10 % del consumo total de pescado y productos del mar en los Veintisiete. Un 25 % procede de las capturas en los caladeros de la Unión Europea y el resto corresponde a importaciones de terceros países.
El Ejecutivo comunitario cree que la aplicación de las nuevas directrices contribuirá a incrementar en torno a un 1 % esas cifras, y que con ese pequeño porcentaje se podrían crear 4.000 nuevos empleos en esa industria. «Algo muy importante en los tiempos que corren», dijo la comisaria.