«Estamos ante la vuelta del hambre»

La Voz

ECONOMÍA

22 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Está convencido de que la fórmula aplicada a Portugal para salvar la crisis es la contraria de la necesaria. Arménio Carlos (Lisboa, 1955) proclama desde la secretaría general de la Confederación General de Trabajadores de Portugal (CGTP) que el paro es la mayor tragedia de su país y así se lo ha hecho saber a la troika en nombre de los 614.000 afiliados de su sindicato. «Pero es insensible», asegura.

-¿Ha tocado fondo ya Portugal?

-La política del Gobierno no ha hecho más que acentuar el empobrecimiento del país y si sigue por el mismo camino lo acrecentará. Ya hay niños que o reciben la alimentación de la escuela o no comen en todo el día. Estamos ante la vuelta del hambre a este país, algo impensable hace solo dos años.

-¿Pone eso encima de la mesa de la troika cuando le citan?

-Le explicamos lo que éramos y lo que somos ahora, pero parece que no estamos hablando con personas. Son de una enormísima insensibilidad social y para ellos no hay personas, solo números, y lo peor es que saben lo que están haciendo.

-¿Qué fórmula aplicaría para salvar a los portugueses?

-Renegociar la deuda en unos plazos, intereses y montantes razonables. En el 2013 tendremos que pagar solo en intereses a la troika 8.000 millones, que es más de lo que recibe la sanidad o la educación y eso no es razonable. Si tuviéramos los mismos intereses que el sector financiero Portugal solo pagaría la mitad.

-¿Pero el déficit seguiría ahí?

-Sí, pero si permiten un mayor plazo para reducirlo el país podría suavizar la política de austeridad y al Estado hacer inversiones con retorno que promuevan el crecimiento económico.

-¿Y el empleo, dejará de caer?

-Con las políticas de la troika no. Llevamos ya mucho empleo destruido y seguirá así mientras no rompamos con ellos. Es urgente convocar elecciones para recuperar la soberanía y nuestro propio camino.

-¿Serán las del 25 de abril o el 1 de mayo citas capaces de propiciar cambios?

-Estamos trabajando para que no sean citas conmemorativas más. Tienen que ser dos momentos determinantes de contestación mayoritaria al Gobierno y a la troika y decir ¡basta!