Pósitos pontevedreses rozan el consenso en la gestión del pulpo

m. Gago / e. abuín REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Evaristo Fernández, patrón mayor de Cangas; José Manuel Rosas, de Bueu, y José Pérez, de Ribeira.
Evaristo Fernández, patrón mayor de Cangas; José Manuel Rosas, de Bueu, y José Pérez, de Ribeira.

Plantean retirar las nasas el fin de semana y guardar un mes de veda

20 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Fumata blanca en la Federación de Cofradías de Pescadores de Pontevedra. El grupo de trabajo ha rematado su ronda de reuniones y ha alcanzado un principio de acuerdo sobre la gestión del pulpo en las Rías Baixas. Es una fórmula mixta, que obligará a todas las partes a ceder en cierta medida a sus pretensiones, sobre todo en el principal campo de batalla, las condiciones y períodos del calado de las nasas. El próximo viernes, las cofradías volverán a reunirse para un encuentro donde se rendirá cuentas a todos los pósitos sobre la propuesta de consenso que se llevará a la Xunta. Estos son los puntos principales del acuerdo.

El conflicto

Régimen de calado de las nasas. Este es el principal punto que enfrenta a cofradías como Bueu, partidaria de que las nasas puedan quedar caladas de noche -con una vigilancia estricta incluso el fin de semana-, y a otras como Cangas, que proponen que se traigan a tierra cada día. La solución de consenso, según el presidente de la federación provincial, José Antonio Gómez Castro, es que se aplique un plan de control estricto para garantizar que las nasas puedan quedar caladas todos los días de lunes a viernes en fondos de profundidad superior a 25 metros. Si se dejan a menor profundidad, habría que retirarlas diariamente. Los fines de semana tendrían que estar siempre en tierra.

Horario

Jornada laboral. Gómez Castro precisó que el horario de trabajo sería de seis de la mañana a cuatro de la tarde. Ahora bien, algunas cofradías pretenden que se controle el horario de salida de los barcos del puerto, con el fin de evitar abusos. De esta manera, la embarcación solo podría zarpar hacia el caladero una hora antes de empezar la jornada. «Si ese control existe y se cumple el horario, incluso se podría revisar el número de nasas por embarcación», dijo Gómez.

Veda

Mes o mes y medio. Es otro punto muy debatido. Bueu, por ejemplo, apostaba por una veda muy corta o incluso por su supresión. Esta cofradía tiene un amplio y creciente mercado de fresco y teme perder sus clientes si los desabastece por períodos prolongados. La propuesta pactada es que la veda sea de un mes -el de junio- y que la apertura del pulpo coincida el mismo día que la de la nécora, el 1 de julio. Si hubiese que ampliar ese paro, siempre tendría que hacerse contando con semanas de mayo, nunca de julio, puntualizó Gómez Castro.

Capturas

Pendientes de las cifras. Está previsto que se mantenga un tope de capturas de 40 kilos por tripulante y otros 40 por embarcación durante el primer mes de trabajo tras la apertura de la veda. Este tope se podría ampliar, o reducir, dependiendo de la evolución de las capturas y de los precios en el mercado. La idea es conseguir gestionar el recurso de la forma más racional posible.

Los protagonistas

Patrones mayores de Bueu y Cangas. El patrón mayor de Bueu, José Manuel Rosas, pide que se aplique «sentido común» y recordó que «non se pode cambiar todo da noite para a mañá». Por su parte, el patrón mayor de Cangas, Evaristo Fernández, sostiene que el control de horarios y zonas de capturas es un elemento básico en este plan, que acepta porque no quiere que se repitan los enfrentamientos del año pasado.

Rías baixas

De Silleiro a Corrubedo. Las cofradías pontevedresas consideran imprescindible que se lleve a cabo un único plan del pulpo para la totalidad de las rías de Vigo, Pontevedra y Arousa. Esto obligaría a que las de la parte coruñesa de Arousa aceptasen la propuesta y en este punto se evidencia una nueva fractura. El patrón mayor de Ribeira, José Pérez, propone seguir como hasta ahora, con lo que podrían dejar las nasas caladas todos los días, menos durante la veda. Pérez advierte de que no se aceptarán intromisiones de los pontevedreses, que querrían unificar los planes hasta Corrubedo.