El Gobierno retrasa a los 63 años las prejubilaciones voluntarias

f. fernández REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Sáenz de Santamaría y Báñez, antes de dar cuenta de los acuerdos del Consejo de Ministros.
Sáenz de Santamaría y Báñez, antes de dar cuenta de los acuerdos del Consejo de Ministros. chema moya < / span>efe< / span>

Exigirá 35 ejercicios cotizados para acceder al retiro anticipado no forzoso

16 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

«Tenemos un sistema de pensiones sólido, pero hay que hacer reformas para garantizar su sostenibilidad a largo plazo». Así fue el prólogo con el que la ministra de Empleo, Fátima Báñez, trató de allanar el terreno para explicar los cambios que se avecinan en el sistema público de pensiones. Están incluidos en un real decreto ley de nombre interminable (para favorecer la continuidad de la vida laboral de los trabajadores de mayor edad y promover el envejecimiento activo) aprobado ayer por el Consejo de Ministros. Báñez confesó que las medidas son para acercar la edad real de jubilación (63,9 años) a la legal (65) y endurecen las condiciones para retirarse antes de tiempo.

Jubilación anticipada

Dos años más de cotización. El real decreto endurece las condiciones para cobrar una pensión antes de finalizar legalmente la vida laboral (ahora fijada a los 65 años y un mes de edad, que irá avanzando de forma progresiva hasta llegar a los 67 en el 2027). Así, el acceso a una jubilación anticipada voluntaria estará limitado a trabajadores a los que les queden dos años para jubilarse (es decir, con 63 años; hasta ahora, con 61) y que lleven cotizados un mínimo de 35, dos más que el resto. La forzosa (por despido) exigirá 33 ejercicios de alta en la Seguridad Social y quedará reservada para asalariados a los que les queden cuatro para jubilarse (61 años). Las prejubilaciones parciales quedarán restringidas a empleados que lleven 33 cotizados y seis en la empresa. Todas estas modificaciones no afectarán a los expedientes de regulación firmados o que se acuerden antes del 15 de abril y se respetarán los compromisos hasta el 2019.

Trabajo más pensión

Alargar la vida laboral. Los trabajadores que lleguen a la edad de jubilación podrán seguir activos y cobrar al mismo tiempo la pensión. El pero es que recibirán el 50 % de la prestación. Los funcionarios públicos jubilados podrán compatibilizarlo solo con un trabajo privado.

ERE para los de 50 años

Coto a los despidos para el personal de más edad. Las empresas con más de 100 trabajadores y con beneficios que despidan a asalariados mayores de 50 años ya tienen que asumir el coste del paro y de las cotizaciones sociales. A fin de que las regulaciones colectivas no se ceben con esos empleados, se exigirá la compensación cuando el porcentaje de despedidos de más de 50 años sea superior al peso de ese colectivo en la plantilla total. Los costes los pagarán las empresas que tengan beneficios en dos años consecutivos dentro del período comprendido entre el ejercicio anterior al despido y los cuatro siguientes.

Factor de sostenibilidad

Un comité de expertos para analizar el baremo. Báñez avanzó que en el plazo de un mes creará un comité de expertos «independientes» para «revisar el factor de sostenibilidad», el mecanismo de ajuste automático de ciertos parámetros de las pensiones. La ministra negó que entre sus planes se encuentre acelerar el proceso para retrasar la edad de jubilación de 65 a 67 años.

Báñez destacó que esta reforma de las pensiones es a petición de la Unión Europea y que cuenta con el plácet del Pacto de Toledo. Pero CC.?OO. y UGT la calificaron de «burla al diálogo social y al Pacto de Toledo». La portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, tildó de «vergüenza» esta modificación «unilateral» del sistema.