La empresa estudia denunciar al Gobierno por la reforma energética
28 feb 2013 . Actualizado a las 10:57 h.Corren malos tiempos para las empresas eléctricas. La reforma energética aplicada por el Ministerio de Industria, que incluye, entre otros, la creación de nuevos impuestos a la generación, está pasando factura a las compañías. En general, ganan menos dinero que el año anterior. Y no parecen dispuestas a permitirlo. Hace unos días, el consejero delegado de Gas Natural Fenosa, Rafael Villaseca, ya advertía de que los nuevos impuestos que deben abonan las eléctricas repercutirán tarde o temprano en el coste de la energía. O sea, que subirá más aún el recibo de la luz que pagan los ciudadanos.
Ayer, por si a alguien no le hubiera quedado claro, repitió el mismo mensaje el consejero delegado del gigante del sector, Endesa, con una fuerte presencia en Galicia. Andre Brenan anunció que trasladará a sus clientes el impacto de la reforma energética «todo lo que sea posible», informó la agencia Efe. En el caso de Endesa, los recortes a la distribución y a los pagos por capacidad aplicados el año pasado le han restado 300 millones, y la menor retribución de la generación en las islas 100 millones, según la presentación a analistas realizada ayer por la compañía. Además, los nuevos impuestos a la generación, que entraron en vigor el 1 de enero, tendrán un impacto en las cuentas de la compañía del 2013 de unos 900 millones, según las primeras estimaciones de Endesa, informó Efe.
Recorte de inversiones
Además de trasladar los nuevos costes a los contribuyentes de a pie, las eléctricas recortarán inversiones y parecen dispuestas a batallar con el Ministerio de Industria para tratar de tumbar alguna de las medidas incluidas en la reforma energética. Brenan avanzó que están analizando al detalle todas las medidas a nivel jurídico para estudiar la posibilidad de recurrir alguna ante los tribunales, como la obligación de consumir carbón nacional incentivado, que está produciendo pérdidas en las cuentas de resultados, informaron fuentes de Endesa.
Consecuencia, según la compañía, de los recortes aplicados el año pasado por el Gobierno al negocio de la generación, Endesa ganó 2.034 millones, un 8 % menos que en el 2011. A la vista de la caída, la empresa ha decidido no repartir dividendos entre sus accionistas. Brenan explicó que han optado por no pagarlos por «prudencia» y para ganar liquidez ante la actual situación económica y regulatoria en España.
En principio, Endesa no tiene previsto tocar a su plantilla, vía despidos, como sí anunció que hará este año Gas Natural Fenosa.