La eurozona mostró ayer su satisfacción con los números que ha arrojado la auditoría del sector bancario. «Me reconforta que el déficit de capital se sitúe ligeramente por debajo de los 60.000 millones de euros», señaló el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, en un comunicado, en el que señaló también que la ayuda europea de hasta 100.000 millones de euros acordada en julio será «más que adecuada».
Las cifras también gustaron en el Banco Central Europeo. La institución aprovecho para ofrecer su apoyo a los planes de las autoridades españolas para garantizar que se cumplirán las necesidades de capitalización «en el tiempo y los términos estipulados».
Desde el FMI, su directora gerente, Christine Lagarde, saludó la valoración «transparente» del sector bancario español expresó su confianza en que la recapitalización cristalizará en un sistema «más sólido» que «ayudará a reactivar los flujos de crédito y a promover el crecimiento y el empleo».