Los trabajadores insisten en acusar a la dirección de aplicar la reforma laboral del PP, mientras el sindicato lo niega
25 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Los trabajadores de Forem, la fundación de Comisiones Obreras en Galicia, iniciaron ayer una huelga indefinida contra el ERE propuesto por la dirección del sindicato y con el que pretende la salida de 24 de los 35 empleados de la plantilla, que se irían con una indemnización de 20 días por año trabajado. Los empleados aprovecharon el primer día de paro para hacer una concentración en Santiago, a las puertas de la sede. Y allí, María Díaz, representante de los trabajadores, volvió a defender que Comisiones aplica en esta regulación la reforma laboral del PP contra la que el sindicato promovió una huelga general.
«Dicen los gerifaltes de CC.OO. que no se nos aplica esa reforma laboral, pero sí lo hacen porque la previsión de pérdidas económicas está en la nueva normativa y no en la anterior, y ese es el argumento que se está utilizando para justificar el ERE», explicó. La noticia, hecha pública la semana pasada, trascendió de las fronteras gallegas. E incluso el propio Ignacio Fernández Toxo, secretario general, se vio obligado a terciar asegurando que el despido por causas objetivas con 20 días y un tope de 12 mensualidades lleva décadas en vigor y nada tiene que ver con la última reforma laboral.
Desde la dirección explican que no hay nada más objetivo que el brusco desplome que han sufrido las partidas destinadas a fondos de formación, lo que impide que Forem mantenga su estructura actual. De los siete centros existentes en Galicia se cerrarán tres; el de Cervo (Lugo), en un local cedido por el Ayuntamiento, con dos empleados; el de Ferrol, con sede propia y dos trabajadores; y el de Ourense, también con dos empleados y en régimen de alquiler, precisó ayer María Díaz.
Las negociaciones abiertas entre ambas partes no han servido para cristalizar ningún acuerdo, lo que ha generado malestar en sectores del sindicato que entienden que, en una cuestión tan sensible socialmente, la organización debe ceder y ofrecer una salida algo más generosa, que vaya más allá de lo que establece la legislación.
Los trabajadores de Forem, por ejemplo, recuerdan que el ERE que aplicó la CIG en su fundación permitió que los empleados saliesen con 45 días por año trabajado. La plantilla, en huelga indefinida desde ayer, entiende que deben explorarse otras vías antes de aplicar una extinción de los contratos, como es la reducción de jornada.
Las negociaciones se encuentran abiertas por ambas partes hasta el próximo 4 de octubre, pero las posturas se hallan ahora muy distantes. La dirección de Comisiones insiste en que los fondos de formación son finalistas y que no se puede sacar de donde no hay.