Es la consecuencia de haber eliminado la bonificación del 35 % en la cuota a la Seguridad Social
23 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.La cuantificación de los efectos sobre los parados de las medidas aprobadas por el Consejo de Ministros refleja importantes reducciones en la cobertura de las personas en paro. Empezando por la reducción a partir del primer día en 28 euros mensuales de la prestación de los nuevos parados al eliminarse la bonificación del 35 % de la cuota a la Seguridad Social, que pasa de pagarla el Estado a correr a cargo del parado, hasta la pérdida de 129 euros mensuales en promedio desde el séptimo mes, también para los que se queden sin trabajo a partir del decreto.
Recorte de la prestación
La norma que entró en vigor la semana pasada recorta la prestación contributiva que recibirán todos los nuevos parados al término del sexto mes, ya que solo recibirán el 50 % de la base reguladora en vez del 60 %.
El efecto directo en los desempleados es una pérdida de 129 euros al mes de media, según los cálculos realizados por el gabinete económico de la confederación de CC.?OO. Eso significa que el parado que tenga que cobrar el paro durante un año perderá casi 775 euros. Y si es de larga duración que agota los 24 meses de prestación habrá dejado de percibir 2.324 euros en total.
A este recorte se añade otro que reduce la prestación por desempleo en 27,8 euros mensuales para cada parado, al suprimir la bonificación del 35 % en la cuota del trabajador a la Seguridad Social y que ahora deberá abonarse en su totalidad por el desempleado. Así, los 864,9 euros de la prestación contributiva mensual media bruta que se convertían en 813,3 euros netos al descontar solo el 65 % de la Seguridad Social correspondiente al trabajador ahora se convertirán en 785,5 euros netos para el parado, al tener que pagar el 100 % de la cuota. Este recorte puede suponer 442 millones menos al año para los parados.
Mayores de 52 años
El subsidio especial para mayores de 52 años que permite llegar hasta la jubilación si no se logra trabajo y no se tienen rentas suficientes se retrasa a los 55 años, con lo que se eliminan 3 años de esa prestación, pero también 3 de cotización para la pensión. Y los mayores de 45 años no tendrán opción a los 426 euros de subsidio especial.