Inteligencia artificial para la industria agroalimentaria, aplicada en Ourense

r. r. redacción / la voz

ECONOMÍA

Una aplicación de la empresa Akor reajusta las operaciones industriales para mejorar la producción en plantas de procesamiento de cereales

11 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Los procesos industriales son rutinarios, mecánicos, pero de vez en cuando cambia una variable que hace necesaria la intervención humana. Hace falta una decisión para reajustar la operación y mejorar la producción. Pero esta orden también puede ser ejecutada por una máquina, por un software que, después de ser analizadas todas las opciones, elija la mejor. Al menos así puede ocurrir en la industria del sector agroalimentario mediante una aplicación pionera desarrollada por la empresa ourensana Aukor, que ha creado el primer sistema integral de gestión dotado con inteligencia artificial y aplicable a fábricas de harina y piensos o panificadoras. En general, el método es válido para las plantas de procesamiento de cereales.

«El sistema es capaz de tomar decisiones por sí mismo para mejorar el proceso productivo. Compite con la decisión humana», explica Carlos Sampayo, director de Aukor, una empresa de ingeniería ubicada en Tecnópole (Ourense), el parque tecnológico de Galicia.

La aplicación ha sido desarrollada por ingenieros de la propia firma en colaboración con investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid y de la Universidad de Colonia (Alemania). El sistema de control integral mediante inteligencia artificial es capaz de tomar decisiones que hasta ahora se adoptaban mediante monitorizaciones y correcciones manuales. O, lo que es lo mismo, requería una orden humana. Por el contrario, el producto tecnológico funciona de forma totalmente autónoma y es capaz de predecir, anticiparse y actuar sobre los procesos de fabricación siguiendo unas pautas establecidas e integrando nuevo conocimiento mediante un proceso de autoaprendizaje, lo que le permite optimizar el rendimiento de la planta para que sea más eficiente y segura.

En el caso de los cereales, por ejemplo, un factor a tener en cuenta es la temperatura, ya que por cada diez grados más la humedad baja un punto, lo que hace variar el proceso de producción de la mañana a la tarde. Hace falta, por tanto, introducir un ajuste que habitualmente se lleva a cabo mediante una acción humana, pero que ahora podrá ejecutarse con la nueva aplicación.

Internacionalización

El producto está en fase de comercialización, un proceso que requiere de una internacionalización que comenzará con la búsqueda de su implantación en países como Polonia, Turquía, Rusia o Marruecos, fundamentalmente. Hace años, Aukor desarrolló un sistema de almacenaje inteligente manejado íntegramente por robots y que ha sido exportado a varias empresas.