El naval ferrolano peleará en Madrid si persiste el silencio del Gobierno

Beatriz García Couce
beatriz couce A CORUÑA / LA VOZ

ECONOMÍA

Unas 5.000 personas se manifestaron en A Coruña en demanda de trabajo para Navantia

10 feb 2012 . Actualizado a las 14:18 h.

Llamaron a la puerta del Concello de Ferrol y obtuvieron respaldo del alcalde, pero no la respuesta que esperaban a sus demandas. Ayer llevaron su petición de carga de trabajo hasta la Delegación del Gobierno en A Coruña y tampoco hubo luz verde ni al dique flotante ni a la sexta fragata F-100. Por ello, al término del encuentro con Samuel Juárez, los representantes de los comités de Navantia Ferrol y Fene y de su red de compañías auxiliares aseguraron que llegarán a Santiago y Madrid para presionar a los máximos responsables del naval público español.

«Isto non é o punto e final. É o punto e seguido. Démoslle un prazo razoable ao delegado do Goberno para que haxa solucións para a situación do sector e quedou en presionar a Madrid. Pero non vale marear máis a perdiz, queremos resultados xa», afirmó Fernando Sinde, presidente del comité de Ferrol.

Los trabajadores protagonizaron en A Coruña una gran manifestación que transcurrió sin incidentes y que sirvió para poner fin a los tres días de marcha a pie que secundaron los 120 delegados sindicales de los astilleros de la ría ferrolana para denunciar el crac hacia el que camina el sector si no se logran nuevos pedidos.

La última etapa de los caminantes se inició en Oleiros y finalizó en la rotonda de Casablanca, en donde se reunieron con los trabajadores que llegaron a la zona a bordo de 67 autobuses fletados desde las antiguas Astano y Bazán y también en coches particulares. Desde ese punto, los 5.000 manifestantes se dirigieron hacia la Delegación del Gobierno, en donde les esperaba un fuerte dispositivo de seguridad, con policías antidisturbios rodeando el edificio.

Mientras los representantes de los comités de empresa mantenían el encuentro con Samuel Juárez -quien no hizo declaraciones y tampoco permitió la entrada de los periodistas al edificio-, los trabajadores corearon consignas alusivas a la carga de trabajo y protestaron también por la presencia de los policías, a los que algunos manifestantes lanzaron huevos y tuercas sin que se llegasen a producirse altercados.

En la protesta estuvieron presentes el portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez; el diputado de este mismo partido Fernando Branco, los alcaldes de Narón y San Sadurniño, Xosé Manuel Blanco y Secundino García, y los secretarios generales de CC.?OO. en Galicia y CIG. Todos coincidieron en la necesidad de no dejar caer uno de los principales sectores industriales de Galicia y manifestaron su apoyo a las reivindicaciones de los trabajadores.

Por dentro del puerto

La reunión se inició en torno a las once de la mañana y, tras su culminación, el regreso de los manifestantes se realizó por el interior del puerto, para evitar nuevos colapsos de tráfico.

Navantia construye en la ría ferrolana en estos momentos dos megabuques anfibios para la Marina de Australia y la quinta F-100 para la española. Dos de esos barcos serán entregados a principios del verano, por lo que las compañías auxiliares ya han tenido que ir prescindiendo de trabajadores, en torno a unos 700. «En marzo e abril a situación será xa crítica», advirtió Fernando Sinde. Los operarios reclaman la construcción de un dique flotante para la división de Reparaciones de Navantia Fene-Ferrol, que podría fabricarse en la ría y que generaría dos años y medio de carga de trabajo para unos 900 operarios. También exigen que se cumpla el compromiso firmado por el Gobierno del PSOE en la última reconversión, en el 2004, que contemplaba la construcción en Ferrol de la sexta fragata F-100.

«O problema non acaba de xurdir»

«O de Navantia non é un problema que acaba de xurdir, senón que leva seis anos nos que non se conseguiu nin un só pedido novo». Apuntó que la Xunta acompañará la necesidad de buscar carga de trabajo para el astillero y sus empresas auxiliares, pero advirtió que no suplantará al Ministerio de Industria ni a la SEPI. Respecto a la movilización de ayer, Feijoo opinó que «se a marcha tivera lugar antes, igual agora non estabamos así. O problema está agora na axenda do Goberno», informa Serafín Lorenzo. Las movilizaciones de los trabajadores comenzaron en mayo del pasado año.