El naval holandés se dispara tras bloquear a los astilleros gallegos

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Gustavo Rivas

Firmó medio centenar de buques desde que denunció al sector en Bruselas

05 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

«El naval holandés se está poniendo las botas a costa de lo astilleros españoles». Esta afirmación de un empresario del sector gallego podría parecer parcial, si no fuera porque la cartera de pedidos de unos y otros así lo demuestra.

Según datos publicados por la propia industria holandesa (Holland Shipbuilding Association), en los últimos seis meses, los grandes constructores navales han firmado cerca de medio centenar de pedidos de distinta tipología de buques, por valor de más de 2.000 millones de euros. En este mismo período, ningún astillero español ha podido contratar barcos, porque carece de incentivos fiscales para poder hacerlo en igualdad de condiciones que Holanda o que el resto de los países de la UE, desde que el 27 de junio del 2011 Bruselas hiciera valer una denuncia del propio sector holandés (liderado por el macroastillero Danem) contra el sistema de bonificaciones aplicado hasta entonces en España (el denominado tax lease).

Desde ese momento, el bloqueo de la contrucción naval en España es absoluto, mientras en Holanda no paran de firmar contratos, especialmente de buques offshore de apoyo a plataformas petrolíferas, un nicho de mercado en el que se han especializado los astilleros privados gallegos como Hijos de J. Barreras o factorías Vulcano, ambas en concurso de acreedores y sin carga de trabajo en las gradas.

Holanda gana

Y la sangría continúa. Esta misma semana el gigante holandés IHC Merwede se adjudicaba un pedido de 200 millones, tras cerrar el 2011 con 1,1 billones de euros de facturación. Keppel Offshore y Marine Wraps sumaron contratos por otros 150 millones respectivamente. El poderoso Danem acaba de engrosar en su cartera de pedidos otras cuatro unidades offshore por 400 millones más, mientras que su filial Stellendam Maaskant firma la construcción de dos buques sísmicos de apoyo a la investigación para la industria del petróleo.

Junto a Holanda, los astilleros noruegos y franceses firman contratos y mantienen la actividad en las gradas, sacando así evidente rentabilidad a la ausencia obligada de la industria naval española en el mercado desde hace más de seis meses.

En el año 2007 la cartera de pedidos solo de los astilleros gallegos superaba los 4.000 millones de euros, la mitad procedente del sector privado. Más del 50 % de su carga de trabajo estaba contratada con la industria del petróleo noruega. Hoy la carga de trabajo que aún queda en las gradas, contratada antes de la crisis del tax lease, apenas suma 500 millones.