26 de junio 2009
26 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.En 1995 entraba en la corporación de Silleda por primera vez Carme Fidalgo como concejala del BNG. Era además el estreno de la formación nacionalista en ese salón de plenos. Reclamó entonces la creación de una concejalía de la Mujer, en la primera sesión a la que asistió el 14 de julio. En otra, celebrada el día 24 de junio del 2009, hace ahora siete años, anunciaba su marcha de la de la corporación. Habían transcurrido catorce años.
Su labor de fiscalización de los gastos, la demanda de nuevos servicios públicos o el precio del agua fueron algunas de las líneas de actuación de Carme Fidalgo en esa trayectoria como munícipe silledense. En el pleno de despedida recibió el aplauso de todos los ediles de la corporación. En una posterior entrevista concedida a La Voz, afirmaba que «xa estou cansa de repetir» y que «a última lexislatura pesoume moito, produciume un desencanto total e absoluto». Anunciaba su continuidad en la política local y comarcal. Y realizaba la siguiente valoración de los tres alcaldes con los que compartió corporación: «Tiveron a habilidade de parecer o que non eran».