Hemeroteca. Hace una década se pedía el pago de más tributos por las empresas que explotaban el viento en las comarcas
16 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.En julio del 2007, los municipios de la zona acogían con satisfacción la sentencia del Tribunal Supremo que obligaba a los parques eólicos a tributar en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) como bienes de características especiales. De esa forma el tipo ascendía del urbano de cada municipio ?con el mínimo en el 0,4 %? hasta el 1,3 %, un hecho que multiplicaba la recaudación. Entre los municipios con mayor número de aerogeneradores, como Lalín y Rodeiro, se apuntaba ya la intención de que las empresas pasasen a tributar todo lo que permitía la sentencia del Supremo. En esa línea, el entonces concejal de Hacienda de Lalín, Manuel Gómez Estévez, recordaba que en septiembre del 2003 se había modificado la ordenanza reguladora del IBI en esa línea. Por su parte, el entonces teniente de alcalde de Rodeiro, Xosé Vence, defendía la construcción de un parque eólico singular para el municipio, como una fórmula para abaratar los costes por alumbrado público.