La disminución de la actividad industrial y constructiva se dejó sentir de forma notable contribuyendo a un significativo descenso de accidentes laborales
27 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La larga travesía de la crisis dejo huérfanos a los polígonos industriales de la zona y huecos de edificios vacíos en naves donde antes la actividad era constante. El cierre de muchas de esas fábricas, algunas con mas de un centenar de empleados, junto con el estallido de la burbuja inmobiliario propiciaron una caída, más acusada en la comarca de Deza, de la actividad.
Una reducción que tuvo su reflejo en un descenso muy acusado de la siniestralidad laboral que se redujo a menos de la mitad en los últimos años. En el 2005 se produjeron en los municipios de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes un total de 899 accidentes laborales. De entre ellos dos mortales, uno en Rodeiro y otro en Lalín y 31 graves, mientras que el resto fueron de carácter leve.
Una cifra que no tiene nada que ver con los 373 que se producían el año pasado, según datos del Instituto Galego de Seguridade e Saúde Laboral.
En el 2014 se produjo un solo accidente mortal, en este caso el suceso tuvo lugar en Lalín y el fallecido fue un hombre. Se produjo también una bajada en el número de trabajadores que resultaron heridos graves. En la zona, el pasado año, los heridos graves fueron solamente catorce, entre ellos, solo dos mujeres, una en Forcarei y otra en Vila de Cruces.
Por municipios también hay diferencias. La pujanza industrial y constructiva de Lalín se dejó sentir también en el número de accidentes laborales. En el 2005, ela capital dezana era la que sumaba un mayor número de heridos en siniestros con 394, que dejaban un saldo de 382 heridos leves, once graves y uno mortal.
Le seguía muy de lejos A Estrada con 218 heridos en accidente laboral, 210 de carácter leve y ocho graves. Cerdedo sumaba dieciocho leves; Dozón once: ocho leves y tres graves y Agolada trece: once leves y dos graves. Le seguía Rodeiro con 31, veintiocho de ellos leves , dos graves y uno mortal. Silleda, arrojaba un saldo de 157, con doce personas que sufrieron heridas graves frente a 145 leves, mientras que en Vila de Cruces se produjeron a lo largo de ese año 37 heridos, 33 de ellos de carácter leve y cuatro graves.
En el 2014, la siniestralidad laboral en Lalín bajaba de los cerca de 400 a 130 con 111 hombres y 19 mujeres que resultaron heridos, 104 hombres y 19 mujeres de carácter leve y seis graves, todos ellos hombres. A Estrada acortaba distancias con 85 personas siniestradas, y solo dos heridos graves, ambos, hombres. Silleda le siguió de cerca con ochenta, un herido grave y 79 leves, 23 de ellas mujeres. Rodeiro sumó diecinueve, todos leves y seis de ellos mujeres.
En el resto de los municipios, las cifras son poco significativas. En Agolada se registraron once heridos por accidente laboral, todos ellos sufrieron heridas leves, y fueron nueve hombres y dos mujeres. Mientras que en Cerdedo fueron seis heridos leves, todos hombres y doce en Forcarei, de los cuales solo dos eran mujeres. Todos ellos leves. En Vila de Cruces se contabilizaron veintidós, 21 leves, entre ellas cinco mujeres y solo un herido grave, en este caso una mujer.
Una bajaba paulatina
El descenso se fue produciendo de forma paulatina s. En el 2011, Lalín cerraba el año con un balance de 224 trabajadores heridos, de los cuales solo 44 eran mujeres y A Estrada con 171, 25 de ellos féminas. Silleda con 101. Mientras que en el 2006, Lalín cerraba con 327 heridos laborales y A Estrada con 225 y 117 Silleda.
899 en 2005
Heridos en la zona
En el 2005, la siniestralidad laboral elevaba a 899 el número de heridos en la zona.
373 en 2014
Accidentes laborales
En el pasado año 373 trabajadores resultaron heridos tras accidentes en el trabajo.
69 mujeres
Accidentadas en el trabajo
Del total de 373 heridos en accidentes laborales del 2014, 69 eran mujeres.