Yolanda Castaño destaca el Cocido do Orgullo como celebración que reúne a colectivos de toda la geografía
26 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Cocido do Orgullo se libró de la lluvia del pasado año, y se notó una mayor afluencia que entonces a las actividades programadas en la jornada central del sábado, con la Praza da Igrexa como centro neurálgico de todas ellas. Allí hubo desde juegos tradicionales a actuaciones musicales ya desde la mañana, con Canela Cafuné y A Banda da Balbina. Y allí también la poetisa Yolanda Castaño pronunció el pregón de la fiesta, destacando que la capital dezana reúne al mismo tiempo a toda la militancia LGTBI nacional. Indicó, en esa línea, que mientras el 28 de junio se trata de una celebración por todo lo alto, pero de cada colectivo en su sede, «hoxe Lalín dá un paso adiante e recibe a todas as agrupacións de toda a xeografía aquí», albergando una unión de fuerzas y de inquietudes compartidas, «e soños comúns que non sempre teñen a oportunidade da convivencia». Apuntó la convivencia que se genera en torno a un buen cocido, señalando la cita como una jornada ejemplar y emocionante, de diversidad y de integración a todos los niveles.
Fue lo que sucedió en Lalín, convertido en el Kilómetro Cero de la tolerancia. Personas llegadas de distintos lugares compartieron conciertos, talleres, tuvieron oportunidad de informarse en puestos colocados en la calle Loriga y de compartir luego mesa y mantel. Hasta de asistir a un partido de rugby para plasmar un placaje a la homofobia, o a un taller de sexualidad femenina. El Cocido do Orgullo se despide hoy, con The Lakazans a las 13.30 horas en la Praza da Igrexa.